Valladolid

Obras en festivo, un embudo y otro carril cortado en Parquesol

De manera que sí, tal y como comprometió el pasado lunes (21 de abril) el concejal de Movilidad, Alberto Gutiérrez, cuando se cerraron los dos carriles del principal acceso al barrio, como es la calle Hernando de Acuña (y uno en sentido de salida), a la altura del cruce con Adolfo Miaja de la Muela, los operarios han trabajado en festivo para agilizar en lo posible los trabajos en los dos puntos críticos en obras (Hernando de Acuña y Ciudad de la Habana), donde se prevé la finalización de las mismas y la reapertura de los carriles cortados el 30 de abril.

Pero, por ahora, las dos calles no solo han mantenido los mismos cortes sino que han sumado uno más este miércoles con el cierre temporal del citado carril de Ciudad de la Habana, entre el cruce con Amadeo Arias y hasta la intersección con Hernando de Acuña. En este punto, al menos, se ha colocado señalización vertical (al borde del corte mismo), para informar del corte de dicho carril, que ha permanecido cerrado desde primera hora de la mañana y que se ha reabierto pasadas las seis de la tarde, una vez rellenada la zanja abierta y cubierta en superficie con chapas. En el lado contrario, donde están cerrados los dos carriles de la misma calle, entre Hernando de Acuña y Juan García Hortelano, no hay señalización previa que informe del cierre. Y en la intersección misma de Ciudad de la Habana con Hernando de Acuña las vallas, además, invaden ligeramente el carril derecho de Hernando de Acuña, también sin señalización que anuncie el estrechamiento más allá de una tímida señal que reduce la velocidad a 20 kilómetros por hora.

Las obras, en el caso de Ciudad de la Habana, mantienen también cortado el paso de cebra que conecta sus dos aceras al borde del cruce con Hernando de Acuña. Los trabajos allí, y el corte de los carriles de salida, comenzaron el pasado 10 de abril.

Y desde el 21 de abril se mantienen cortados los dos carriles de un punto más concurrido aún, como es el de la entrada al barrio por Hernando de Acuña, donde se desvía toda la circulación hacia la calle Adolfo Miaja de la Muela, también sin información previa que anuncie dicho corte hasta llegar al borde mismo de la zanja abierta para introducir los tubos de la red de calor.

Allí, sin embargo, el punto más peligroso para la circulación se encuentra en la calzada de salida del barrio, ya que las obras cortan el carril izquierdo de salida y reducen la circulación a un solo carril, lo que forma un peligroso embudo para los conductores que hasta la misma valla de obra pueden circular por los dos carriles con normalidad y que después se encuentran con uno solo, sin espacio suficiente, y con la zanja al lado, para continuar hacia Doctor Villacián y la avenida de Salamanca. En este punto tampoco se ha colocado señalización previa que anuncie siquiera el estrechamiento de la calzada.

Sea como fuere, los trabajos en este cruce también deben finalizar el próximo 30 de abril. Las obras en el barrio, no obstante, continuarán en otras calles.