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Un grupo de moteros se calienta en una hoguera en Pingüinos 2019.

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Un grupo de moteros se calienta en una hoguera en Pingüinos 2019. GABRIEL VILLAMIL

Pingüinos ronda los 15.000 inscritos, rumbo a los 30.000

El año pasado, con una cifra parecida, la lluvia del sábado y las alertas en la Península dejaron la cifra final en los 28.000

Antonio G. Encinas

Valladolid

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Viernes, 11 de enero 2019

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Quinientas toneladas de leña. Que ya es leña. Y todo para que, según Óscar Puente, no haga tanto frío como se preveía. Que hace hasta calor, no había más que ver, a las doce del mediodía, a los moteros sentados en las terrazas montadas por los bares instalados junto a la carpa central de la plaza pingüinera. Que esto ni parece Pingüinos, por más que los del motoclub portugués Tuku-tuku carguen el motocarro de troncos para los 'por si acasos', que ellos ya son veteranos aquí y saben cómo las gasta el termómetro en cuanto se oculta el sol. Era una mañana para que las autoridades se dejaran ver por la zona y José Manuel Navas, de Turismoto, hiciera un primer balance optimista. Se basó en las cifras que más dependen de la climatología, las que dejan los moteros extranjeros.Así, recalcó que esperan a «800 ó 900 franceses», de los que más de cien ya estaban acampados el jueves por la noche, basándose en lo que habían notificado los diferentes motoclubes galos.

También habían vuelto a la concentración los carabinieri italianos, 22 pilotos con sus máquinas 'vintage'. Y otro ejemplo de que la inscripción iba por buen camino: el año pasado hubo dos moteros canarios entre los inscritos y este año ya superan la veintena.

Hasta ha vuelto la responsable de turismo de Torremolinos, Aida Blanes –también socialista– que trata de observar y tomar nota para potenciar la concentración motera que se celebra allí en octubre y que en 2018 alcanzó su edición número ocho.

Todos estos buenos síntomas auguran que la edición 36ª de Pingüinos va a ser un éxito. Solo queda la incógnita, como explicó José Manuel Navas, de saber si el 25% de aumento en la inscripción respecto al año pasado se debe al celo madrugador de los moteros o a un incremento real. «Si es así, superaremos los 30.000 inscritos seguro», vaticinaba.

Por la noche, antes de la celebración de la Nochevieja Pingüinera, se contabilizaban más de 14.000 inscritos. Faltaba hora y media para el cierre de las inscripciones, pero el ritmo en la caseta de entrada animaba a pensar que se iban a rebasar con cierta holgura los quince mil. Una cifra que estaría en el entorno de la que se registró el año pasado en el segundo día de concentración y que pone a Pingüinos en buena línea de cara a alcanzar los treinta mil. Cabe recordar que el año pasado llovió en la jornada del sábado y se produjeron alertas amarillas en varias zonas de la Península, lo que siempre cuenta en contra. Incluso el viernes hizo más frío del que ayer se dejó sentir en la zona de acampada. Especialmente en la carpa de la plaza, que junto a los bares consiguen que haya una sensación más resguardada que en el resto del campamento, donde el viento hace disminuir la sensación térmica.

En el día de las visitas políticas, la ministra Reyes Maroto subió al escenario para brindar por el Año Nuevo motero antes del concierto de Javier Gurruchaga.

Jesús JulioCarnero, presidente de la Diputación de Valladolid, aprovechó para recordar que este evento supone un espaldarazo tremendo para el turismo provincial. «Tenemos el reporte de que vuelven el resto del año con esa entrada –que incluye descuentos en los centros de la Diputación–, y lo hacen. Y los participantes lo agradecen», señaló. Óscar Puente –«hace estupendo y va a hacer mucho mejor», insistía– hizo de anfitrión por la noche de la ministra de Industria, Reyes Maroto, que hoy participará en el desfile de banderas.

Un etilómetro a disposición de los moteros

La Dirección General de Tráfico ha plantado una carpa en la que se dispone de un etilómetro para que los moteros comprueben si están en condiciones de coger la moto más allá del «tranquilo, que controlo». Si se han tomado un par de cervezas con la cena o alguna copa, antes de lanzarse a la carretera con el peligro que ello supone se puede comprobar, de forma fehaciente y antes de que lo hagan la Guardia Civil o la Policía Local, si se ha sobrepasado el límite legal permitido. Aunque en todo caso lo ideal para conducir es que el alcohol en sangre sea 0,0.

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