Crece la cifra de jóvenes que se emancipan para no contagiar a su familia
Las inmobiliarias de la ciudad constatan un incremento de jóvenes que se independizan para evitar el contagio a sus convivientes, un reto que aún resulta difícil por el «elevado» precio del alquiler
Más de un año sin apenas vida social es un lastre que arrastran muchos jóvenes castellanos y leoneses. Su emancipación es, desde que comenzó ... la pandemia, un reto a superar para la generación comprendida entre 25 y 30 años. La precariedad laboral y los bajos salarios a los que se enfrenta este sector de la población obligan a la mayoría a continuar compartiendo techo con sus padres pero ahora, con la llegada del buen tiempo y la relajación de las restricciones, ha surgido una nueva oleada de jóvenes que desean volar del nido y alejar el virus de su entorno familiar. Hasta el momento, un total de 7.088 jóvenes de entre 20 y 29 años se han contagiado de coronavirus en Valladolid. Este rango de población y su elevado nivel de encuentros sociales suponen un riesgo para los familiares con los que conviven. Este es, entre otros, uno de los motivos que lleva a muchos veinteañeros a tomar la decisión de buscar un piso de alquiler y retomar, en parte, la normalidad.
El primer paso es encontrar un piso que se adapte a sus necesidades, que lo llevan a cabo a través de los portales inmobiliarios habilitados en la web. Ahí comienza su búsqueda y en ellos pueden filtrar y elegir, entre otros requisitos, que el inmueble cuente con terraza o que se admitan mascotas. Durante los primeros cuatro meses de 2019, la cifra de usuarios de la franja de 25 a 34 años que buscaban vivienda de alquiler en Valladolid en la plataforma 'pisos.com' fue de 18.412, representando un 20% del total. Siguiendo los mismos criterios y trasladándolos al año 2021 aumentó hasta los 20.728 usuarios. «Con estas cifras podemos concluir que se ha producido un aumento del 13% de este tipo de búsquedas», aseguran fuentes de la plataforma de venta y alquiler de pisos 'on-line'.
También las inmobiliarias a pie de calle constatan que se ha incrementado la solicitud de información por parte de la población comprendida entre 25 y 35 años, pero que los altos precios de las viviendas les obligan a tener que solicitar alquileres.
Más oferta y menos demanda
Actualmente, Valladolid cuenta con entre 450 y 500 inmuebles disponibles para alquilar, pero los elevados precios de la mayoría de estos llevan a los jóvenes a descartar una buena parte de ellos, puesto que el presupuesto medio ronda los 600 euros por piso compartido. Desde el verano pasado se ha notado un incremento de la demanda de pisos por parte de la población más joven y, se supone, en edad de independizarse, pero la oferta ha disminuido porque muchos propietarios han decidido ponerlos en venta en vez de tenerlos en alquiler, según explican algunas agencias inmobiliarias de la ciudad. A la mayoría les une la preocupación de poder compatibilizar el ocio con sus amistades con la protección hacia un entorno familiar que se encuentra entre la población de riesgo ante la covid.
Un reto al que se enfrentan en la denominada 'nueva normalidad' y que además tiene que sortear la dificultad de contar con una nómina, contrato o avalista que justifique que podrá hacer frente a los gastos ocasionados de la renta.
Vacío o con muebles nuevos
Junto al alquiler de viviendas, las inmobiliarias han constatado también que se han incrementado las solicitudes de información acerca del estado en el que se encuentran los pisos porque de ello depende también el precio por el que el piso está disponible para su alquiler. Gonzalo Jolín, presidente de Aspriva (Asociación de Promotores Inmobiliarios de Valladolid), explica que «desde que comenzó la pandemia los jóvenes demandan pisos para alquilar por la imposibilidad de adquirirlos y son los que realmente mueven el mercado del alquiler en Valladolid». Muebles que sean relativamente nuevos o, directamente, que esté sin amueblar, son sus preferencias, según aseguran las principales inmobiliarias.
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