Hay que ir al mercado ya,... antes de que suban más los huevos
«Apuesto contracorriente por ahorrarse lo que cuesta un '9' y que el Real Valladolid se lo gaste en un '8' o en un jugador que aporte coherencia al centro del campo»
No queda tanto para que se abra el mercado, y ya hay quien piensa -servidor, uno de ellos; Almada es otro- que ya deberíamos estar ... en la puerta, engrasando el fax para que no se atasque en el momento de la verdad y nos veamos a las 23:59 del próximo 2 de febrero pendiente de migajas que no mejoran lo que hay en ese vestuario. Tú y yo sabemos, el director deportivo mejor que nadie, que las ventanas de fichajes que se abren en enero acostumbran a dejar helado al más pintado y, salvo honrosas excepciones -Cyle Larin, la última-, los jugadores que se incorporan con el tren en marcha acaban atropellados por la situación, el contexto, su falta de adaptación, la incomprensión del entrenador o, simplemente, su propia inoperancia.
Como ves, no le tengo ninguna fe a lo que venga en invierno. Si no encontró su hueco en verano, ¿por qué iba a hacerlo ahora, con seis meses de competición a la espalda y, muy probablemente, con un puñado de oportunidades en su equipo de origen? En esa quiniela que acaba siendo acudir al mercado sin posibles, no hay demasiados precedentes que nos inviten al optimismo. Al contrario, el nombre de Manchev sigue sobrevolando la memoria de los aficionados cuando se habla de refuerzos en blanco y violeta... ¡Y de aquello ya ha llovido dieciocho años!
De ahí que en este debate que tanto alimenta las tertulias futboleras, un servidor haya decidido desmarcarse de la opinión popular y apostar contracorriente por ahorrarse lo que cuesta un '9' para gastárselo en un '8' o en un jugador que aporte coherencia al centro del campo -un perfil Monchu bastaría-.
La teoría tiene un argumento detrás. Lo explico. Dando por sentado que Almada no va a cambiar esa fórmula de encontrar solo el camino del gol a través de las bandas, ¿para qué incorporar otro jugador que intente rematar todos esos balones que llegan llovidos a derecha e izquierda? El último día ya se probó con cuatro -Marcos André, Jorge Delgado, Mario Domínguez y Arnu-, y el resultado fue el mismo que si se hubiera probado con cinco -Latasa-. ¿No sería mejor -pregunto- abrir otra puerta en el centro del campo y dotar de un mayor criterio a tu juego para tener más peso en los partidos y de paso diversificar tus llegadas al área?
Llámalo teoría o paranoia, pero la labor de un técnico, y esto lo ha venido repitiendo Almada desde que aterrizó, es dotar de más recursos y herramientas a sus jugadores para que puedan desenvolverse y llevar a la práctica su fútbol con más posibilidades de éxito. Pues bien, hasta la fecha y tras lo visto y demostrado, la propuesta del uruguayo tiene mucho de efecto embudo y poco de funcional y pragmático.
Con un tercio ya de competición a la espalda, se antoja necesario un golpe de timón que dé un vuelco a la tendencia del equipo. El camino andado se queda corto, y las sensaciones apuntan a acertar en el próximo mercado como única solución para no caer en la monotonía de la temporada anterior.
No queda tanto para que se abra el mercado, y en esa puerta habrá que estar los primeros para que enero no sea el único mes que se nos haga cuesta arriba.
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