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Álvaro Yepes
Viernes, 22 de julio 2016, 23:44
El tiroteo perpetrado en Munich que, por el momento, se ha cobrado la vida de ocho personas y ha dejado al menos una decena de heridos, ha cogido por sorpresa a todo el país teutón. Y también a una menor vallisoletana que se encontraba en la ciudad de vacaciones, hospedada en casa de una amiga alemana. Carla Díez-Astrain, de 17 años, no se explica que esto haya podido pasar: «Nadie se lo esperaba. Aquí todo el mundo es bueno, la gente confía en el de al lado y se ayudan los unos a los otros. Es como una especie de paraíso y esto es terrible».
Por el momento, la policía, que inmediatamente cortó varias calles, el metro y el servicio de autobuses urbanos de la ciudad, ha recomendado a la población permanecer en sus domicilios.
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