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Adolescentes torreños posan en la plaza. Laura Negro

Torrelobatón, la vida un año después del macrobrote

Los vecinos no terminan de recuperar sus rutinas tras la oleada de contagios que les llevó a autoconfinarse en agosto de 2020

Laura Negro

Valladolid

Domingo, 29 de agosto 2021, 08:19

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Los veranos en Torrelobatón huelen a pandillas en bicicleta. A risas en las terrazas y a tardes de piscina y de paseo. También huelen a ... noches sentados al fresco, con una buena conversación entre vecinos, sin más precaución que ponerse una chaqueta sobre los hombros. Sin embargo, por segundo año consecutivo, el coronavirus ha impedido que los torreños disfruten de algunos de sus grandes placeres estivales. Este mes de agosto el pueblo huele a saludos desde la distancia, a juegos infantiles con mascarilla, a chapuzones sin ahogadillas, a pandillas burbuja que buscan cómo matar mejor el tiempo de forma segura y también huele al miedo por revivir la pesadilla de 2020. Porque hace ahora justo un año, por cortesía de la covid, la villa torreña pasaba el peor verano de su historia.

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