33 excusas para reírse con Pepe

«Es una manera de tener todo tu trabajo recopilado en un libro». José Orcajo (Segovia, 1948) acaba de publicar un nuevo libro de viñetas, chistes que han ido viendo la luz en los últimos años en las ediciones segoviana, vallisoletana y palentina de EL NORTE DE CASTILLA, en la desaparecida revista 'El Cochinillo Feroz' y en 'Siglo XXI'. Se trata de 'Humor bajo 33 excusas', un libro de casi trescientas páginas repletas de ese humor tan característico que Pepe Orcajo refleja día a día en sus viñetas periodísticas.

«Lo titulé así porque las viñetas están agrupadas y distribuidas a lo largo de 33 áreas temáticas. No existe otra intención. Áreas que vienen dadas por asuntos o temas que yo he tratado en la prensa con más o menos insistencia, como la despoblación, la sequía o los yacimientos de Atapuerca, por citar tres ejemplos», asegura el dibujante. Efectivamente, el libro contiene chistes sobre la despoblación, sobre la pertinaz sequía, las cosechas, la vuelta al cole, la escasa participación en las manifestaciones del Primero de Mayo, las obras urbanas e incluso la Iglesia y el sexo. Orcajo coge todos estos temas y los pasa por el tamiz del humor, ese fino humor que tantos premios le ha granjeado a lo largo de su dilatada trayectoria profesional.

El humorista gráfico sigue acudiendo a su cita diaria con los lectores de EL NORTE a través de la sección 'No somos nadie', y los domingos con su 'Segovianos de Perfil', espacio en el que, a lo largo de los últimos once años, ha desfilado la sociedad segoviana en pleno. Además administra un blog en Internet «que he tenido abandonado unos días, pero que voy a actualizar ahora», dice.

Pepe continúa fiel a sí mismo. «El estilo de Orcajo es de una eficacia asombrosa: son dibujos aparentemente inocuos, blandos, simples, como de páginas de historieta (...) pero que actúan y se mueven en situaciones complejas, de actualidad y con incidencias en asuntos serios. Se diría que, con sus notas satíricas, llama la atención de lo que sea, incluso de temas peliagudos», señala en el prólogo el estudioso del humor gráfico español Luis Conde.