La Casa de los Picos de Segovia pide salvoconductos para alumnos afectados por el toque de queda
coronavirus en segovia ·
El director del centro, Alberto Albarrán, define esta nueva restricción como «echar sal en la herida» abierta por la falta de espacios
«Es como echar sal a la herida». Así define Alberto Albarrán el nuevo problema añadido que supone el toque de queda a la ya ... de por sí trastocada dinámica docente en la Escuela de Arte y Superior de Diseño de la Casa de los Picos. Más de cincuenta alumnos están afectados por la prohibición de transitar por la calle a partir de las diez de la noche por vivir fuera de Segovia, indica el responsable del centro. Además de jóvenes de que se desplaza a diario de diferentes puntos de la provincia como Cuéllar, El Espinar o Valverde del Majano, también hay estudiantes que acuden a clase cada jornada en autobús desde Burgos, Ávila, Valladolid o Madrid.
Si estos pupilos terminan a las 21:30 horas, que es la hora establecida para el cierre del centro a raíz de la aplicación del toque de queda, Albarrán deduce que no tienen tiempo para llegar a sus domicilios a la hora fijada a no ser que se expongan a una multa.
El director recuerda que la Casa de los Picos es un centro único por las enseñanzas que se imparten en él en toda la provincia y que además es de referencia en el ámbito regional. Hay alumnos de Bachillerato que cursan en el Mariano Quintanilla que, aunque acaben a las nueve, sus transportes parten a las diez menos cuarto.
Si antes fue la ubicación de estudiantes en el citado instituto por las medidas de separación interpersonal ordenadas por la Junta en las aulas, ahora el toque de queda «es una vuelta de tuerca más» de los efectos secundarios de la pandemia del coronavirus en la gestión educativa y las medidas adoptadas para frenar el avance de la covid. En este sentido, Albarrán no tiene dudas: «lo primero es la salud de todos»; pero las soluciones cada vez se antojan más complicadas. Por el momento, el director del centro ha elaborado una lista de alumnos afectados por el horario del toque de queda para que puedan contar con una especie de salvoconducto que les permita regresar a sus casas sin ser multados.
La otra parte del puzle que ha de ajustar la Casa de los Picos es cómo arañar tiempo para que las «medias horas que pierden» los jóvenes del turno de noche no traigan consigo una merma en el aprendizaje de la materia. Albarrán asegura que se están buscando fórmulas, como sopesar el tiempo del recreo, pero aún está todo en el aire.
Sin «condiciones dignas»
La sección de Educación de CGT Segovia se ha hecho eco de las reivindicaciones de los alumnos matriculados en la Escuela de la Casa de los Picos, «que siguen vigentes y sin tener unas condiciones dignas para ejercer su derecho a una educación pública y de calidad. La última consecuencia, derivada del actual estado de alarma es perder la última hora lectiva».
Durante el mes de octubre «realizaron movilizaciones y concentraciones, incluso ante la sede de las Cortes de Castilla y León, para denunciar que se ven obligados a comer en la calle, y tienen problemas de transporte que les obliga a llegar con horas de antelación a Segovia, ya que más de la mitad del alumnado de Bachillerato viene desde diferentes pueblos», señala el sindicato. Ante «la aparente preocupación de nuestra Dirección Provincial de Educación», reclamar «una solución a todos estos problemas y que se escuche a los afectados, así como revisar la ubicación de estas aulas y horarios, máxime cuando hay otras posibilidades».
En su opinión, las familias, los docentes y el propio alumnado «están mostrando flexibilidad para adaptarse a la nueva realidad educativa, en la que priman las medidas y protocolos sanitarios», pero no ven «esta buena disposición de adaptación» ni en la Dirección Provincial de Educación ni en la propia Consejería de Educación, que son los que tienen que autorizar los cambios», informa Ical.
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