París Hilton cobra 260.000 euros a la hora en su trabajo como dj

Hacen lo que les gusta -si no estuviesen pinchando música la estarían bailando- y encima cobran..., y por lo visto bien. En muchos casos, es lo único que saben hacer, y no se avergüenzan en reconocerlo.

Como en cualquier orden de la vida, el caché viene, no tanto en función de la música que pinchan, sino en la capacidad de atracción de masas que tienen. En eso, Paris Hilton es la número uno, y por eso cobra 260.000 euros por hora, como recoge 'Divinity.es'.

El producto nacional es algo más barata. En la cabeza del ránking se encuentran los inseparables Alaska y Mario Vaquerizo. Según informaba Jesús Mariñas en La Razón, Mario ha llegado a solicitar 18.000 euros por un bolo en Marbella, aunque el líder de las Nancys Rubias lo niega. Alaska, que también pincha bajo el seudónimo de The Mexican Acid Queen viene a cobrar lo mismo. Casi nada.

Kiko Rivera se ha sabido ganar el pan haciendo lo que le gusta. El hijo de la Pantoja ha llegado a pedir unos 10.000 euros en unas fiestas patronales. Un poco más barato es Fonsi Nieto, cuyo caché es de 8.000 euros, mientras que Sofía Cristo ronda los 3.000.

Bimba Bosé, David Delfín y Rossy de Palma también se han reconvertido en pinchadiscos. Su caché viene determinado según el evento y si pinchan juntos o por separado. Su media ronda los 5.000 euros por sesión.

Más económicas son las djs hipsters del momento: Brianda Fitz James y Miranda Makkaroff. Su precio por poner discos ronda los 2.000 euros por una sesión conjunta pero su popularidad en el mundillo alternativo ha crecido a la par que su caché y ahora cobran esa cantidad cada una por su cuenta.

Pero hay presupuestos más baratos. El marido de Sonsoles Suárez, la hija del expresidente Suárez, por ejemplo. Paulo Wilson cobraba, según 'El Mundo', 250 euros por sesión en el restaurante Ten con ten; si bien según el mismo periódico sus contrataciones se dispararon tras la muerte de su suegro.