El CB Valladolid cura sus heridas en Huesca
Un excepcional tercer cuarto de los jugadores morados decidió el encuentro en el feudo del conjunto oscense
OPTA
Sábado, 4 de octubre 2014, 10:39
El Club Baloncesto Valladolid arrancó su nueva andadura en la Liga Adecco Oro, tras cinco campañas consecutivas en la ACB de la mejor forma posible, con una victoria a domicilio ante el Peñas Huesca para mostrar desde el comienzo de la temporada cuál es el papel que ha venido a ocupar el conjunto pucelano a la segunda categoría del baloncesto nacional. Tras una semana dura por cuestiones extradeportivas, con la no tramitación de la ficha de Eduardo Hernández-Sonseca por el contencioso que mantiene el club con la FIBA a costa de Othello Hunter, los morados no perdieron la fe y se rehicieron con un partido solvente. Gran encuentro del cuarteto Uriz-Montañez-De la Fuente-Lucas, los cuatro jugadores morados más valorados.
Un excepcional tercer cuarto del CB Valladolid sirvió para derrotar a un Huesca muy joven. Dejándose llevar y firmando un tercer cuarto excepcional, pleno de aciertos en todas las facetas de anotación, el equipo castellano superó a un Peñas que tuvo que jugar al límite durante los dos primeros cuartos para mantener el marcador igualado.
Arrancó el encuentro con un golpe sobre la mesa en este sentido y los morados (ayer de amarillo) se colocaban con un parcial favorable de 4-8 cuando el cronómetro no marcaba más de tres minutos. Sin embargo, el conjunto oscense no estaba dispuesto a ser la comparsa en un paseo militar de los visitantes en su debut liguero de la temporada ante su afición y no tardó en recortar distancias y llevar la igualada al luminoso del Palacio Municipal de los Deportes cuando se cumplía el primer cuarto del partido. El CB Valladolid conseguía imponerse en ambos lados del parquet, pero el equipo aragonés era poderoso en los rebotes y, además, se aprovechaba de las repetidas pérdidas de balón que cometía el conjunto vallisoletano.
Ventaja local
El segundo cuarto sirvió para que, en medio de la dura pelea que estaba desarrollándose entre ambos equipos, el Peñas Huesca consiguiera levantar ligeramente la cabeza. Hasta nueve puntos consiguió ponerse por delante el equipo aragonés (29-20) en los que fueron los momentos más críticos para los vallisoletanos. Pero, a partir de ahí, el equipo visitante conseguía despertarse, mejorar en defensa y empezar a recortar distancias progresivamente. Micky Stobart dominaba en el poste bajo y parecía que lo peor había pasado. Menos de cinco minutos habían durado las dudas más graves de los visitantes, pero servían para que el Peñas Huesca se marchase con una ventaja de hasta tres puntos (37-36) al descanso.
Los dos primeros cuartos habían sido minutos para que Vicedo, jugador cedido por Estudiantes, Brizuela (acertado en el tiro de dos y negado en los triples) y la eficacia de Hart lograran parar a un Valladolid que supo esperar a su mejor momento. La diferencia bajo los aros donde el equipo pucelano fue muy superior, sobre todo gracias a Javier Lucas y Sergio de la Fuente, fue sin embargo clave para que los locales no consiguiesen abrir hueco. Solo con eso y orden en la pista, el equipo castellano logró aguantar el primer tiempo.
El festival llegó en el tercer cuarto cuando el equipo de Fisac defendió y, sobre todo, se hizo dueño del rebote ofensivo, lo que le permitió sacar contraataques. Román Montañez asumía la responsabilidad de poner al Valladolid en su sitio y lo conseguía con hasta cinco puntos consecutivos.
Los de Fisac estaban de dulce y conseguían que el Peñas Huesca no anotase en la segunda parte hasta que ellos no se habían puesto diez puntos por encima (39-47). Este tercer cuarto sería el que definiría el signo del encuentro, con un Valladolid avasallador que lograba una máxima ventaja de hasta 17 puntos (46-61). El parcial de 11-29 reflejó el escaso acierto aragonés y la eficacia de un Valladolid que supo jugar rápido a la contra y pausado en el ataque posicional. Se cerraba el encuentro a falta del último cuarto con el 48-65 en el electrónico.
Los últimos diez minutos fueron prácticamente de la basura. En ese tiempo, los pucelanos se relajaron por su ventaja y el Peñas Huesca ofreció sus mejores momentos. Un último cuarto para la esperanza local que evidenció que el CB Valladolid sufrió tanto en la Liga ACB como puede disfrutar en la Adecco Oro.