Miel para endulzar los platos
Entre sus múltiples usos está el gastronómico, un alimento natural y nutritivo que le aporta sabor a cualquier plato en la cocina y también en cuestión de repostería
En el campo de la gastronomía los usos de la miel se extienden desde el propio producto hasta las bebidas alcohólicas como la conocida Hidromiel. Su característico sabor dulce le ha llevado a ser protagonista de numerosas recetas vinculadas a los postres y repostería pero su potencial va más allá. Si se echa un vistazo a sus usos con platos de carne, se encuentran interesantes propuestas como ternera a la miel, carne estofada con mostaza y miel, solomillo o carrilladas de cerdo con salsa de miel.
En cuanto a los pescados, salmón, salmonetes, merluza y lubina entre otros, se adaptan sin problemas a un cocinado con una salsa elaborada con miel y mostaza. También se atreve a mezclarse con las verduras en forma de suave aderezo, por ejemplo, para una tempura, wok o una guarnición. Así que este alimento se cuela en todo tipo de preparaciones. No importa la hora porque hay sugerencias para cada momento del día. Para los que buscan opciones ligeras están las brochetas de frutas o macedonia regadas con un poco de miel.
Y para los más golosos, el plátano frito con miel y canela o los populares dulces como las torrijas, pestiños, hojuelas, galletas y los hojaldres de Astorga. Estos últimos buscan conseguir el reconocidos con la figura de Indicación Geográfica Protegida (IGP) que sí tienen sus compañeras las mantecadas de Astorga. Precisamente en la provincia de León está previsto que el próximo año se configure el Consejo Regulador de la Indicación Geográfica Protegida (IGP) de la Miel de León con sede en el municipio berciano de Camponaraya. El Consejo amparará las mieles de castaño y brezo, elaboradas explícitamente en El Bierzo, y las milflores de primavera y mielato de roble y encina para toda la provincia.
El queso un buen aliado
Los productos derivados de los lácteos, como el requesón, el queso fresco, los yogures o las cuajadas funcionan estupendamente acompañados con un poco de miel. Este tipo de postres son habituales en las cartas de los restaurantes pero también sirven para meriendas o aperitivos en el caso del queso fresco. Su textura ligera combina sin problemas con la untuosidad de la miel. Y también hay quien se decanta por este ingrediente a la hora de preparar las clásicas torrijas. Se opta por miel en lugar de azúcar. Pero si además, se le añade algún fruto seco como las nueces o avellanas, en trocitos o trituradas como si fuera un aderezo de polvo, lo convierten en un alimento saludable. De hecho, además de las posibilidades anteriormente mencionadas, se encuentran propuestas similares para los desayunos. Es una manera de arrancar el día recargando el organismo con nutrientes que se quemarán a lo largo del día. Por su puesto, siempre teniendo en cuenta que todo producto debe ser consumido con moderación. La miel también se utiliza en ensaladas, quedan deliciosas con una rodaja de queso de cabra de rulo, con un poco de miel y nueces.