Un forofo de las crepes
de fácil elaboración ·
Álvaro Hernández destaca la sencillez de la receta
Si hay una palabra que no conoce Álvaro Hernández Plaza esa es pereza. Al menos, en lo que a la elaboración de las crepes se refiere.
Da igual que termine de llegar de una agotadora jornada de instituto o de refrescarse en el río Águeda a su paso por la localidad salmantina de Ciudad Rodrigo. Rápidamente se coloca su delantal y se pone manos a la obra porque, como él mismo indica, «las crepes son mi plato favorito».
A sus 13 años, dice que lo que sabe de cocina lo ha aprendido de su abuela Lucía. «En las tardes de invierno he hecho con ella crepes, rosquillas y cañas con azúcar; sí que me gusta cocinar», reconoce.
Esas cañas con azúcar casi se pueden definir como una receta de tradición familiar. Antiguamente no faltaba en bodas o fiestas, junto a las rosquillas, perrunillas y mantecados, al menos en la zona de donde es originaria su abuela, El Rebollar salmantino.
En cuanto a las crepes asegura que las que ha elaborado para mostrar en este espacio le han quedado «mejor que nunca», y lo cierto es que no lo dice de manera gratuita, pues rápidamente da cuenta de ellas acompañadas de crema de cacao.
La elaboración es «muy fácil», y aunque su madre, Sonia, pulula por la cocina mientras Álvaro se mueve entre fogones, recita de memoria todos los ingredientes y las cantidades que necesitan para la ejecución.
El joven dispone todos los ingredientes necesarios en la encimera pues el primer paso consiste en mezclarlos perfectamente. Parte del truco está en que quede una mezcla líquida, sin grumos. Se trata de una receta diferente a las tortitas americanas por lo que, si queda espesa, se debe añadir un poco más de leche.
Álvaro no se lo piensa dos veces y una vez que la mezcla tiene la textura deseada gracias a la ayuda de la batidora, directamente va depositando cucharadas en la sartén. Además, cuenta con una que es específica para esta tarea.
Indica que hay quien la deja reposar en la nevera «un rato», pero en su caso tiene comprobado que el resultado no varía si te saltas este paso.
El resultado son unas tortas muy finitas que Álvaro a veces acompaña con crema de cacao, pero tampoco deja de lado la fruta. «Me gustan de todas las maneras» y, de hecho, las elabora para toda la familia.
Ingredientes:
500 ml de leche, 350 gr de harina, dos huevos, una cucharada sopera de azúcar, una pizca de sal, 35 gramos de mantequilla y otro poco de mantequilla para extender por la sartén.
