Javier Izquierdo: «O superamos localismos y trabajamos juntos, o el futuro será peor para todos»
El nuevo delegado del Gobierno afirma que el gustaría escuchar alguna vez a la Junta «criticar el 'dumping' fiscal que lleva años haciendo de Madrid un paraíso para los grandes patrimonios»
Es el hombre de Pedro Sánchez y sus ministros, de todos ellos, en Castilla y León. Javier Izquierdo Roncero (Mieres, Asturias, 1970), es el nuevo ... delegado del Gobierno en la comunidad. Arquitecto y especialista en Ordenación del Territorio, es funcionario superior de la Junta. Su currículum técnico es notable, pero en este puesto va a ejercitar su lado político. Ha sido secretario del PSOE en Valladolid y es un dirigente bregado en la oposición: a Javier León de la Riva, en el Consistorio de Valladolid, y a los consejeros de Juan Vicente Herrera desde el escaño de las Cortes. Y conoce la gestión pública. Fue director de Vivienda en Asturias y secretario de Infraestructuras con Ábalos. No va a ser un delegado institucional, de posado y protocolo. Izquierdo coge sitio en primera fila del debate público autonómico.
–Asumir la Delegación del Gobierno supone un plus de confianza política por parte de Pedro Sánchez, ¿puede ser la pista de salida hacia un relevo en el PSOE de Castilla y León y en la candidatura a la Junta?
–Es una muestra de confianza del presidente del Gobierno que yo agradezco enormemente, que haya contado conmigo para ser el delegado del Gobierno en Castilla y León, igual que unas semanas atrás me ha incorporado a la permanente del partido. En este caso, intentaré hacer mi tarea de delegado lo mejor posible. Mi intención es recorrer toda la comunidad para tratar de estar en todos los rincones que requieran la presencia del Gobierno de España para buscar soluciones.
–¿Es consciente de que políticamente se va a explotar esa vía de contraponerle a Luis Tudanca?
–Yo tengo la función de ser el delegado del Gobierno en Castilla y León, ese es mi papel. Cada uno tenemos nuestro ámbito y todo el mundo tiene las cosas claras. Vengo a trasladar el mensaje del Gobierno de España, las políticas que estamos haciendo para mejorar la vida de los ciudadanos y para ser el oído del Gobierno en esta comunidad. Parafraseando a Demetrio Madrid, mi intención es que nada de lo que sucede enCastilla y León se sea ajeno al Gobierno de España.
Izquierdo culpa al PP de que no lleguen los 142 millones pendientes del IVA: «Con tal de votar en contra del Gobierno hacen daño a los ciudadanos»
–Quien gobierna lleva ventaja, ¿ha perdido el PSOE una oportunidad histórica en Castilla y León tras el resultado de mayo?
–Hemos tenido un magnífico resultado electoral. Hacía muchos años que el PSOE no ganaba todas las convocatorias electorales y el partido hizo un esfuerzo extraordinario con Luis Tudanca al frente. Solo la posición radical de Cs a la hora de ni siquiera explorar posibilidades de gobierno impidió que hubiera un gobierno de cambio. La reflexión que hay que hacer es qué han hecho otras formaciones. El vipresidente de la Junta prometió un cambio y Rivera impuso una posición que ha impedido una oportunidad de cambio que en esta comunidad se necesita como el comer. Llevamos 33 años de gobierno de la derecha y Castilla y León ha perdido 170.000 habitantes mientras que España ganaba 8 millones.
–Ha mencionado los resultados electorales, ¿qué lectura hace de pasar de la victoria de abril al empate técnico con el PP por delante en senadores de noviembre?
–El hundimiento de Cs propició el incremento de otras formaciones a la derecha y eso ha cambiado el resultado, pero el porcentaje de voto al PSOE ha sido muy grande. Contribuimos en Madrid con doce diputados, que son el 10% de los que tiene PSOE.
–Le toca dar la cara en Castilla y León por la gestión del Gobierno de Pedro Sánchez, pero también de Pablo Iglesias.
–El Gobierno es uno. Soy el delegado de todo el Gobierno presidido por el presidente Sánchez con los ministros de este primer gobierno de coalición. Escucho a veces un tono peyorativo hacia determinados miembros del Gobierno por su origen político, incluso su origen social. Todo el mundo tiene derecho a participar y formar parte de las instituciones. Están todos los ministros que ha querido el presidente, con toda la legitimidad.
Sobre la relación con Luis Tudanca: «Cada uno tenemos nuestro ámbito y todo el mundo tiene las cosas claras»
–Todos los ministros, que son muchos, han seguido el criterio de Igea y Mañueco de que un Gobierno de coalición necesita más altos cargos.
–La labor del Gobierno de España es ingente. La democracia, su calidad, no se mide por cuántos ministros tiene un Gobierno sino por cómo lo hace. Es legal, es legítimo y se hace con el ánimo de responder mejor a las necesidades de la ciudadanía.
–¿Qué espera del día a día con Alfonso Fernández Mañueco y Francisco Igea?
–Respeto institucional, lealtad y la mejor coordinación posible. Espero la máxima colaboración en beneficio de los ciudadanos.
–El Ministerio de Hacienda debe 142 millones a Castilla y León por el IVA de diciembre de 2017, ¿los va a pagar?
–Se ha explicado que hay un problema legal que viene de la etapa de Mariano Rajoy. Se intentó solucionar con los Presupuestos Generales del Estado de 2019 y el rechazo del PP impidió una solución legal. Esos presupuestos están liquidados. Se intentó y contó con el rechazo del PP.
«La calidad de la democracia no se mide por cuántos ministros tiene un Gobierno, sino por cómo lo hace»
–¿Y no hay solución política posible? El PSOE ha votado en las Cortes a favor de que la Junta reclame ese dinero
–Ha habido claros intentos del Gobierno de mejorar la financiación de las comunidades, con una mejora de la senda de déficit, de las entregas a cuenta. A mí gustaría que la comunidad autónoma estuviera preocupada por lo que pasa en otros lugares en defensa de los intereses de Castilla y León, me gustaría escuchar a la Junta criticar el 'dumping' fiscal que lleva años haciendo de Madrid un paraíso fiscal para los grandes patrimonios. Muchos han salido de Castilla y León y han dejado de tributar aquí. Reivindicar que esa política pone en riesgo la unidad de país.
–Eso es una cuestión, pero los 142 millones son dinero que los ciudadanos de Castilla y León ingresaron en diciembre de 2017, corresponden a la comunidad y no se pagan por cuestiones administrativas o de práctica presupuestaria...
–...Son legales, son cuestiones legales. Hay que cumplir las leyes. Puede haber otras soluciones, que es lo que se intentó en 2019 y contó con el rechazo del PP en el Congreso. Hay que apelar a la responsabilidad de dirigentes que, con tal de votar en contra siempre de un Gobierno, hacen daño a los ciudadanos.
–¿Será la legislatura de la reforma de la financiación autonómica? ¿Mantendrá el argumento de que debe contemplar el sobrecoste que implica atender a una población envejecida y dispersa?
–Pues me gustaría que fuera la legislatura de la nueva financiación, pero el PP está instalado en la tónica en la que se instala siempre que pierde una elecciones, en la crispación y la confrontación. El modelo de financiación autonómica, más allá de que haya otras mayorías, es importante que salga con el acuerdo del PP. Animaría al señor Mañueco a que haga reflexionar a Pablo Casado.
«La financiación autonómica se tenía que haber revisado en 2014, cuando el PP tenía mayoría absoluta y, con todo a su favor, no lo hizo»
–Los líderes autonómicos de PP y PSOE sí urgen esa reforma.
–A ver si es efectivo en el caso del PP.Esperemos que hagan reflexionar a Pablo Casado sobre la conveniencia de asumir una responsabilidad que elPP no quiso asumir cuando gobernaba. La financiación autonómica se tenía que haber revisado en 2014, tenían mayoría absoluta, y no lo hizo, con todo a su favor. Esperemos que se avenga ahora, porque eso significará que la sanidad, la educación y los servicios sociales públicos en Castilla y León sean mejores.
–Mañueco ha solicitado por carta la convocatoria de la Conferencia de Presidentes para abordar ese asunto y el de la despoblación, ¿qué va a hacer la vicepresidenta de Transición Ecológica y Reto Demográfico por el padrón de Castilla y León?
–El escenario es complicado en el medio plazo, llevamos más de 30 años perdiendo población. El ministerio va a aportar fondos de Transición Justa a comarcas concretas y vamos a ver cómo se sustancia la financiación del reto demográfico en los presupuestos, pero el PP debería hacer una reflexión. La gente se queda a vivir por el empleo y los servicios. Es evidente quién presta lo segundo y también las competencias de promoción económica, que dependen de la Junta de Castilla y León. Bajar impuestos a 800 personas en el Impuesto de Sucesiones o ese 'dumping' fiscal de Madrid, rebajas en el IRPF a las rentas más altas... ¿Si aminoran los ingresos, de dónde se va a recortar el gasto? Hay que ser honestos con los ciudadanos.
–Ha mencionado los Fondos de Transición Justa y la Junta, en concreto Francisco Igea, dice que llegarán esos fondos comunitarios a las zonas mineras españolas porque fue el único que los defendió en Bruselas.
–Al señor Igea le encanta ponerse medallas y ser el protagonista de todos los eventos. Si hay un programa político comprometido con el 'New Green Deal', ese es el PSOE. Lo de las medallas, quien se las quiera poner, que se las ponga. El Gobierno de España trabaja para que lleguen recursos a unas comarcas con las que tenemos una deuda histórica y social.
«Con los gobiernos de Rajoy y de Aznar mermaron las plantillas de Policía y Guardia Civil. Parece que es de boquilla cuando la derecha se da golpes de pecho en defensa de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado»
–¿Qué puede ofrecer el Gobierno a los miles de leoneses que ha salido a la calle?
–Comprensión y mi compromiso a estar en esa mesa por el futuro de León. Escuchar sus reivindicaciones y tratar de que lleguen las políticas que tienen que ver con los Fondos de Transición Justa, donde la minería se ha derrumbado y hay que hacer un esfuerzo de solidaridad histórica, y también los de reto demográfico.
–Será el representante del Gobierno en esa mesa, ¿el hecho de que ser un dirigente cercano al alcalde de Valladolid, Óscar Puente, puede suscitar recelos?
–A mí me corresponde escuchar a la ciudadanía leonesa. Esta comunidad autónoma necesita mucha colaboración. A veces se plantea un debate ficticio, de a unos se quita y a otros se da; a veces es un debate entre ciudades, otras entre lo urbano y lo rural... El futuro es el de todos, o somos capaces de superar los localismos y la confrontación innecesaria, y nos ponemos a trabajar por la comunidad, o el futuro será peor para todos. La oportunidad es para todos y los riesgos están ahí para todos, no solo para una parte de la comunidad.
–La experiencia que tienen en León con un Gobierno socialista es un ambicioso Plan del Oeste con infraestructuras comprometidas por parte de Zapatero que no se cumplió.
–Sí se plasmaron muchas inversiones. Por contra, la Junta y el PP llevan años negándose en las Cortes de Castilla y León a aprobar elPlan de Convergencia Interior. Esta es una comunidad con una fractura territorial importante y la Junta se niega sistemáticamente a hacer el Plan de Convergencia Interior que recoge el Estatuto de Autonomía. Eso es una enorme irresponsabilidad.
–Ese Plan del Oeste incluía autovías como la Valladolid-León para entrar en servicio en 2009.
–No vamos a negar que hubo una crisis económica y que los presupuestos de inversión mermaron. Los presupuestos de 2019 eran de un incremento respecto a los de 2018 para Castilla yLeón. Hay una apuesta clara por esas inversiones. El compromiso político fue entonces muy claro y este Gobierno tiene como una de sus prioridades la cohesión territorial. Ahí también tiene que está la comunidad, porque tiene competencias y echo en falta mayor implicación de la Junta y del partido principal que lo sustenta, el PP.
–¿Van a cubrir las vacantes de guardias civiles y policías nacionales? Barcones tuvo que frenar la restricción de horarios de cuarteles por falta de efectivos.
–En los años de gobiernos de Mariano Rajoy hubo una merma significativa de los miembros de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, pasó también en la etapa de Aznar. Parece que es de boquilla cuando la derecha se da golpes de pecho en defensa de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. La realidad es que en esas dos etapas del PP se han perdido efectivos y con el PSOE se incrementaron y se están incrementando. Iremos viendo una mejoría en los próximos años.
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