ASAJA Ávila presenta su candidatura apostando por «juego limpio» en las elecciones

La Asociación Jóvenes Agrarios de Ávila (ASAJA) ha presentado su candidatura a las elecciones agrarias que se celebrarán el 11 de febrero.

Joaquín Pino, presidente provincial, ha recordado las numerosas reivindicaciones de la entidad a organismos como la Junta de Castilla y León, el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medioambiente e incluso a Bruselas. En algunos casos se ha dado “solución” y en otras se ha “salido a la calle”.

En ésta línea, Joaquín Pino defiende que “nadie puede acusar a ASAJA Ávila de no haber abanderado todas las propuestas reivindicativas y de no haber estado en todas las comarcas con los trabajadores del campo”.

Entre esas reivindicaciones consta el problema de precios –reflejado en los cinco céntimos menos que reciben los ganaderos de vacuno por la leche, en comparación con países vecinos de Europa-, el problema del lobo y sus continuos ataques a explotaciones, ante lo que han acudido a la Comisión Europea para que sea “flexible”, o lo que supone la presencia de tuberculosis y su elevado índice, “a consecuencia de la fauna salvaje”, en la zona de Barco de Ávila.

Pino ha añadido que prosiguen las reclamaciones a la ministra y al presidente de la Confederación Hidrográfica del Duero para que se tenga en cuenta la rotación de cultivos, dejando a un lado “la sinrazón de canon cuando no se riega”.

El presidente provincial de ASAJA ha asegurado que se presentan “con el trabajo bien hecho”, ya que “no existen fines de semana”, como les ocurre a los “ganaderos y agricultores de la provincia”.

La puesta en marcha de la campaña ha contado con la presencia de Pedro Barato, presidente nacional de ASAJA, quien en su discurso ha pedido “juego limpio” al resto de organizaciones que presentan su candidatura. “No oirán a ASAJA una palabra contra nadie, esto es para el progreso del sector agrario”, ha afirmado.

Por último, Pedro Barato ha anunciado que se reunirá en febrero en París con otras OPAS para que no haya recortes en relación a la Política Agraria Común (PAC).