La Diputación de León y el Consejo del Bierzo firman el convenio para la puesta en marcha de un banco de tierras comarcal

La presidenta de la Diputación de León, Isabel Carrasco, y el presidente del Consejo Comarcal del Bierzo, Alfonso Arias, han firmado esta mañana un convenio de colaboración a través del que la institución provincial apoyará la puesta en marcha del Banco de Tierras del Bierzo con 80.000 euros, el 80% del coste total de una iniciativa que persigue la recuperación de las fincas abandonadas e improductivas como vía no sólo para reactivar el sector agroalimentario, sino también para evitar el éxodo rural. La subvención de la institución provincial permitirá costear los gastos de funcionamiento que se generen y las actividades que se lleven a efecto. Entre las inversiones inmediatas se encuentra la necesaria para desarrollar el programa informático con el que se controlará la bolsa de fincas. En definitiva, un registro informatizado de todas las propiedades que particulares o juntas vecinales ponen a disposición del Consejo para buscar arrendatarios interesados en dotarlas nuevamente de actividad.

«Los objetivos de este centro pasan por la creación de riqueza y empleo, mediante el arrendamiento de fincas agrarias abandonadas e improductivas; reactivar la economía agrícola comarcal, poner en valor las tierras con aprovechamiento agrícola y aumentar su viabilidad económica, así frenar la pérdida de superficie agraria útil», explicaron fuentes de la Diputación después de la firma del convenio. La idea es evitar la grave situación de abandono de algunos terrenos con el consiguiente riesgo de incendios y recuperar la actividad agraria en zonas afectadas por envejecimiento de la población. Además de propiciar el asentamiento de nuevos agricultores, promover la incorporación de los jóvenes al sector agropecuario y favorecer una mayor competitividad del sector.

Una marca específica. Además de la recuperación de tierras en poulo, la base del funcionamiento del banco de tierras contempla también la comercialización. Por ello, con esta iniciativa se intentará incentivar la puesta en marcha de canales de comercialización, asesorando a los emprendedores para iniciar relaciones comerciales con las que puedan obtener mayor rendimiento económico de la producción agrícola. Además, se promoverá la creación de una etiqueta identificativa de los productos procedentes de iniciativas que nazcan a través de este nuevo centro. Dentro de las funciones de este nuevo órgano también se encuentran promover la firma de convenios con empresas, entidades, asociaciones, plataformas de consumo y mercados de abastos para distribuir estos productos; además de potenciar las relaciones intergeneracionales mediante un programa específico de formación (Consejo de la Experiencia) en el que agricultores jubilados transmitan a jóvenes agricultores la sabiduría agrícola tradicional y la cultura agraria de nuestros pueblos, y favorecer el desarrollo turístico a través del agroturismo.