Luces geométricas para Navidad

«Adrián Cugar es en realidad Adrián Cueva García pero todo el mundo me llama Cugar». Así se presenta este joven diseñador segoviano que lleva doce años viviendo en Madrid por motivos de estudios y trabajo, aunque regresa a Segovia todas las semanas. Está realizando el proyecto fin de carrera en la Escuela Superior de Diseño de Madrid, después de cuatro años trabajando porque aparcó los estudios por motivos familiares. «Ahora que es más difícil encontrar trabajo, he decidido terminar lo que me quedaba de convalidaciones. Hay que reciclarse», declara. Él mismo se recicla e incentiva a los demás para que lo hagan. Lo ha conseguido con el Ayuntamiento de Segovia. Una propuesta suya ha cambiado los motivos de las luces navideñas. Llevaba varios años «con ello en la cabeza», presentó la idea a Clara Luquero y el diseño de Adrián lo incorporará la empresa Electricidad Carmelo Plaza en algunos arcos de la iluminación de Navidad.

Se le ocurrió «mirando los muros de la ciudad», viéndolas formas del típico esgrafiado de las fachadas. «Solo en Segovia e Italia es habitual encontrárselos y me parece que es una riqueza gráfica digna de admirar. Tanto mi abuelo como mi bisabuelo han sido profesores de la escuela de arte de la ciudad y se han dedicado al arte, la restauración, la ornamentación... y me parecía una bonita forma de agradecimiento a mi familia. Mi abuelo va a cumplir ahora 95 años y está emocionado con el proyecto y esa ilusión es mi mejor recompensa», asegura.

También pensó, advierte, «en un proyecto para 'ilustrar' o iluminar la ciudad con su propia cultura. Como se hacía en la Edad Media con los 'libros iluminados', que se llamaban así por el uso de láminas de oro para colorear las ilustraciones». Y cuando presentó la idea, ya madura, a Clara Luquero, encontró una acogida que le llenó de orgullo. Afirma el joven diseñador que «la concejala de Cultura es muy inteligente y amable. Cuentan con un equipazo. Y los responsables de la empresa de iluminación Carmelo Plaza son también muy simpáticos y unos profesionales de primera. La verdad es que da gusto trabajar así».

'Ilumigrafías'

Cuando se le pide a Adrián que describa los diseños de la iluminación dice que a él le gusta llamarlos «Ilumigrafías» y apunta que «había más diseños, pero hemos intentado seleccionar aquellos que tienen un componente más navideño, asemejándose a estrellas o formas de copo de nieve y manteniendo en todo lo posible la forma original representada en los muros». Y en cuanto a las formas explica que «se puede ver en los motivos un componente cristiano, judío, árabe o incluso oriental en tanto que algunos de ellos son muy geométricos. Nuestra herencia cultural añade es una suma de raíces de todo tipo, y es esa unión la que se intenta potenciar con este proyecto».

Aparte de 'rescatar' el esgrafiado, Adrián tuvo otras motivaciones a la hora de plantear su propuesta: «En una época de crisis en la que todo el mundo ve todo oscuro, son importantes proyectos como este para dar un poco de luz a las personas y hacerles ver que estamos rodeados de muchos tipos de riqueza y que ésta va más allá de lo material».

Cree que vivimos en un tiempo «en el que todo está muy polarizado y etiquetado, y esto hace que el entendimiento se pueda hacer difícil entre religiones o ideologías, incluso entre miembros de una misma familia. Todos hablamos pero creo que es importante pararse a escuchar. Escuchando metafóricamente los muros de la ciudad nos daremos cuenta de la cantidad de pueblos que han pasado por Segovia». Para Adrián, «es esta coexistencia de tanta diversidad la que nos hace grandes. Podemos sentirnos orgullosos de ello y disfrutarlo ya que separados podemos llegar lejos pero unidos, podemos llegar a todas partes».

Formación y trabajo

Durante sus estudios, Adrián Cugar fue becado para un proyecto de diseño gráfico en el medio urbano en la escuela Sant Joost de Breda, y fue finalista en el concurso para el logotipo de la Unión Europea. También ha sido creativo web de Leroy Merlin España, de la Uned y del grupo Publicaciones Profesionales, relevante en el sector de la publicidad y los medios, y ha trabajado para varias agencias en diseño de identidades corporativas y webs, como 'freelance' y para la empresa Serincas.

¿Y después de este diseño tan bien acogido en Segovia? «Siempre estoy abierto a propuestas. Actualmente tengo varios pequeños proyectos y estoy buscando patrocinadores para el proyecto final de estudios». Aunque cuenta con seguir trabajando en las luces de Navidad: «Dependiendo de la acogida que tengan, también me gustaría hacer nuevos diseños no solo para el casco histórico como este año». A más largo plazo, Adrián es ambicioso. Quiere «montar un negocio en el que pueda combinar mis dos pasiones: el diseño gráfico y el ciclismo».

Sus diseños lucirán en las calles de Segovia en poco menos de un mes. Quien quiera conocer otros más puede visitar su blog: www.blogspot.com/adriancugar.