Zaratán, La Cistérniga y Santovenia tendrán Biki en los próximos meses
Las obras en los carriles bici de los tres municipios permitirán una conexión más fluida con la capital a corto plazo
Zaratán fue el primero en firmar el convenio de adhesión a Biki, en octubre del año pasado. Pero una conexión ciclista con el alfoz ... no pasa solo por tener estaciones nutridas de bicicletas eléctricas, sino por disponer de una infraestructura segura y Zaratán es, de entre las tres localidades que han pedido Biki, la que peor lo tiene. El carril bici de tierra que discurre paralelo a la carretera de acceso a la localidad -dos carriles por sentido hacia la rotonda que deriva a Equinoccio- está alejado, es incómodo, poco apto para circular de noche y termina abruptamente sin una buena salida que conecte con el término municipal de Valladolid. Después de muchos meses de elucubraciones, el Ayuntamiento se ha decidido por la posibilidad más sencilla y más rápida de ejecutar, sin menoscabo de que en el futuro pueda aparecer otra opción mejor: convertir las aceras en un espacio compartido peatón-bicicleta, con una de sentido bajada y otra de sentido subida para los ciclistas.
Este proyecto, que ya se encuentra en redacción, permitirá al menos que los ciclistas y los numerosos patinetes que se desplazan a diario, en muchos casos por una carretera que es de 90 km/h., dispongan de un espacio más seguro, aunque el uso compartido peatón-ciclista no sea el más recomendado en los manuales de movilidad. La otra opción, casi irreal, era convertir esa carretera de doble vía a 90 km/h. en otra con un carril de 50 km/h. y otro de 30 km/h.
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Santovenia y La Cistérniga, que han firmado hoy los convenios con el Ayuntamiento de Valladolid, lo tienen más sencillo.
En Santovenia, la Junta ha rematado ya el carril bici que une la localidad con Valladolid. «Está incluso en uso», ha explicado la alcaldesa del municipio, Toñi López, a la espera de que se inaugure oficialmente. Es una vía que se ha construido con fondos europeos a través de la Junta de Castilla y León, que había previsto infraestructuras similares en Ávila, Burgos, Palencia y Salamanca, León (dos) y Zamora.
En La Cistérniga hay conexión ciclista, pero faltan «unos 400 metros» para que quede todo conectado. A la altura del Polígono de San Cristóbal, en el cruce con la calle Oro, termina el carril ciclista, que arranca de nuevo al otro lado de la carretera, cuatro carriles más allá y sin un paso de peatones o similar que permita una conexión segura. Más adelante, en la rotonda situada en el cruce de la VA-20, vuelve a ocurrir algo similar. Termina el carril bici y empieza uno nuevo más adelante, pero sin conexión directa salvo el paso de peatones y la acera. Tramos que pertenecen al término municipal de Valladolid y según explicaron el alcalde de la localidad, Alberto Redondo, y Jesús Julio Carnero, ya están trabajando para que se construya el tramo que falta y la conexión sea completa.
«Se instalarán dos estaciones en cada uno de los tres municipios, con 21 bicicletas eléctricas. A lo largo de este año, deberían estar ya instaladas, con lo que contaremos con 6 nuevas estaciones y 66 bicis eléctricas», explicaba Carnero, que se suman a las 97 estaciones y 856 bicicletas que hay en la capital. Unas bicicletas que han evolucionado en los 16 meses que lleva abierto el servicio de préstamo. Del 25% inicial de bicicletas eléctricas y el 75% de manuales a un 50-50.
«Hemos conseguido afianzar un elemento fundamental de movilidad en la ciudad, que va ganando nuevos adeptos», afirmaba el alcalde de Valladolid. «El 80% de los vecinos tienen una estación a menos de 250 metros de su casa o trabajo», señalaba, y aportaba estadísticas de uso que permiten ver la evolución en apenas un año, de abril-mayo de 2023, cuando llevaban apenas un par de meses en funcionamiento, a mayo de 2024. «Los usuarios han pasado de 5.300 a 9.600. En abril-mayo respecto al año pasado es un 35% más. En mayo conseguimos más de 51.000 viajes, un 23% más que mayo de 2023».
En breve se cumplirá otro de los objetivos que se marcaron cuando se creó el servicio, incorporar diferentes tipos de bicicleta, como las de carga o las enfocadas a personas de movilidad reducida. «Tenemos adjudicado por 200.000 euros el proyecto que permite proporcionar 9 bicicletas de carga y 9 adaptadas a personas con movilidad reducida», recordaba el alcalde de Valladolid.
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