Valladolid baja de los 30.000 parados por vez primera en diez años y medio

El Gobierno ya ha dejado caer que no va a derogar la reforma laboral, quizá por si acaso se trunca la tendencia.Sin cambios en mayo, las pautas se repitieron: bajó el paro y subió el empleo; predominaron (más aún) los contratos temporales sobre los indefinidos;y en la marcha del mercado de trabajo se notó una cierta desaceleración, pero tampoco mucha. El impacto –presuntamente negativo– de la subida del salario mínimo en la creación de puestos de trabajo sobre el que algunos advertían parece haber sido más bien nimio. Aunque el pasado mes de mayo no fue tan positivo para el mercado laboral vallisoletano como el mismo mes del año pasado, los registros resultaron, si los comparamos con los de abril, el doble de buenos.

La lista del paro acabó el mes con una disminución de más de mil personas, mientras que la Seguridad Social ganó también más de mil afiliados. Con estos resultados, Valladolid alcanza las 217.639 personas inscritas, la segunda cifra más alta en la serie histórica para un mes de mayo. El número de parados, mientras, cae por debajo de los 30.000 por primera vez en diez años y medio, desde noviembre de 2008.

En concreto, la provincia tiene en este momento 29.873 desempleados inscritos en el Servicio Público de Empleo (Sepe), que son 1.166 menos que en el mes anterior y 2.373 menos que en el mismo periodo del año pasado. En la comparación de tasas, el paro bajó en el intermensual el 3,76% en Valladolid, el 3,23% en Castilla y León y el 2,66% en el conjunto de España; mientras que en el interanual las bajadas respectivas fueron del 7,36%, el 6,66% y el 5,31%.

En cuanto al empleo, la ganancia de afiliados en mayo fue de 1.757, lo que hace que la cifra total –217.639– se queda al borde del récord para este mes que sigue en los 221.931 del año 2008. El incremento de inscritos con respecto a doce meses atrás es de 4.782, mientras que los aumentos relativos son del 0,81% en Valladolid, el 0,74% en Castilla y León y el 1,10% en el conjunto de España en la comparación mensual y del 2,25%, el 1,36% y el 2,78% en la anual, respectivamente.

La bajada del paro alcanzó a todos los sectores, sobre todo al agrario, con 349 desempleados menos, hasta 2.077. En la industria la reducción fue de 112 desempleados, hasta 2.818; en la construcción la lista perdió 156 inscritos, hasta 1.729; y en los servicios, 475 menos, hasta 20.060. El colectivo sin empleo anterior apuntado en las oficinas del Sepe asciende a 3.189 personas, 74 menos que un mes antes. Del total de parados vallisoletanos, 11.934 son varones y 17.939, mujeres. Entre ellos el desempleo bajó en mayo en 730 personas, el 5,76%; y entre ellas, en 436, o el 2,37%.

La cifra de autónomos se vio incrementada en mayo por segundo mes consecutivo, en este caso en 77 personas, hasta las 36.239 inscritas en el RETA. También en Castilla y León hubo balance positivo en este sentido, lo que quiebra de alguna manera la tendencia destructora de meses anteriores. Los 372 nuevos trabajadores por cuenta propia del pasado mayo dejan la cifra total en 195.037.

Por lo demás, las pautas no mejoraron en lo que a las características de la contratación se refiere. En mayo se registraron en Valladolid 23.116 contratos (para ganar 1.757 afiliados, recuerden), que incluso son 5.500 más que en abril, mes en el que se celebró la Semana Santa. Del total de contratos, 21.233 es decir el 91,85% fueron temporales, lo que deja el 8,15% restante para los indefinidos. En Castilla y León tuvieron este tipo de estabilidad el 7,48% y en España, el 8,87% de las contrataciones.

En este sentido, desde UGT llamaron la atención acerca de «la doble precarización que ha crecido exponencialmente durante la crisis, sobre todo tras la reforma laboral». «Mientras los contratos más precarios (temporales y a tiempo parcial) suponían en 2007 algo menos del 25% del total, desde 2012 representan el 36,3% –señalaron desde el sindicato–. La profundidad de la hiperprecarización se constata al ver que más del 42% de los contratos registrados en 2012-2018 duraban días, en su mayor parte menos de una semana».

La Junta, en cambio, puso el foco en que tres de cada cuatro asalariados de la región tienen contrato indefinido, «un punto porcentual por encima de la media española», por lo que el viceconsejero de Empleo en funciones, Mariano Gredilla, abogó por la constitución cuanto antes de un ejecutivo autonómico que dé continuidad a la política de empleo.

Para la patronal, «la evolución positiva del empleo en la región en los últimos meses determina la existencia de una actividad empresarial constante y determinante, que se traduce en que cada vez más personas se incorporan al mercado laboral». «Las políticas de empleo y el Diálogo Social en Castilla y León han sido los pilares de estos resultados y su permanencia y continuidad es la garantía para que se consoliden en el futuro», señalaron desde Cecale.

Desde CC OO, admitieron que los datos de paro y afiliación de mayo fueron positivos, «pero menos de lo posible y de lo esperado, teniendo en cuenta, además, el buen ritmo de crecimiento de la economía de la comunidad, con el 2,6% interanual en el primer trimestre». «Al Gobierno le reclamamos la inmediata derogación de la reforma laboral, que dignifique el contrato de trabajo y potencie la negociación colectiva y la mejora sostenida de los salarios.