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Cofrades de Peñaflor de Hornija recuperan una tradición olvidada durante medio siglo
Un total de 48 cofrades se dan cita en la procesión del Corpus, con 539 años de historia, ataviados con traje oscuro y sombrero de ala ancha
Peñaflor de Hornija es un pueblo fiel a sus tradiciones y a pesar de que en la mayoría de los rincones de España, el Corpus Christi haya pasado a celebrarse en domingo, para los lugareños, el jueves, tal y como dice el refrán, «sigue reluciendo más que el sol». Es por ello, que ayer festejaron con toda solemnidad, su fiesta mayor, y lo hicieron como se ya se hacía en 1484, fecha de fundación de la Cofradía del Santísimo Sacramento y de la Misericordia.
Los cofrades arrancaron los festejos el miércoles, con el 'Rezo de las Vísperas' en la iglesia de Santa María de la Expectación. Un acto litúrgico, que llevaba sin celebrarse más de medio siglo y que han querido recuperar para la ocasión. Ni siquiera los cofrades más antiguos, Saturnino de Gonzalo (98), Anselmo Rodríguez (97), Ovidio Real (93) y Quintilio Bazaco (88) recordaban haberlo celebrado en sus tiempos mozos. Acto seguido, acudieron a una de las arboledas del pueblo a recoger ramas para la tradicional 'enramada' de la sede de la cofradía. Fue un momento de sana convivencia entre vecinos que celebraron, tal como estipulan los preceptos, con vino, «obligatoriamente blanco y pagado a escote por los hermanos», señala Jesús Real, secretario de la hermandad.
Ayer jueves, día grande de Peñaflor de Hornija, los 48 custodios acudieron a la procesión ataviados con traje oscuro y sombrero de ala ancha. Una vestimenta obligatoria para todos ellos. «Lo cumplimos a rajatabla desde antiguo. Suponemos que se estipuló que debía de ser así, para distinguir a los cofrades de los que no lo eran», informa Real. Las varas, los crucifijos, los ciriales y los faroles brillaron como nunca, mientras la comitiva en la que participaron 6 niños de comunión y un gran número de feligreses, recorría los 4 altares que se colocaron para la ocasión por las otras tres cofradías del pueblo, la Santísima Trinidad, la del Cristo de las Eras y la del Rosario. Durante el desfile procesional, todos los cofrades llevaron su sombrero de ala ancha bajo el brazo, en señal de respeto, y al terminar, volvieron a lucirlo en sus cabezas durante todo el día.
La cofradía la gobiernan el Mayordomo, cargo que este año ha recaído en Jaime Real, y los 'Varas', que en esta ocasión han sido Regino Bazaco como Alcalde de Mayores, Jesús Real como Diputado y José Daniel Bazaco como Alcalde de Mozos, cargo, este último, que tiene que ocupar obligatoriamente un soltero. «Todos son cargos anuales, y su nombramiento, se establece por orden de lista, en función de la fecha de entrada a la hermandad», apunta el secretario.
Por la tarde, tras el Santo Rosario se nombró al mayordomo del año siguiente, honor que ha recaído en Jesús Ángel Rodríguez, que celebró la 'Enhorabuena', un ágape para todos los vecinos, que seguirán celebrando sus fiestas hasta el domingo.
