Olmedo tributa un cálido homenaje a la profesora de música Carmen González
Tres colectivos de la localidad reconocen su contribución a la docencia desde que empezó a impartir clases en 1975
A mediado del pasado mes de junio, coincidiendo con la celebración del concierto fin de curso del centenar largo de alumnos de la Escuela Municipal de Música José Martín Salamanca, el consistorio olmedano dando cumplimiento al acuerdo plenario tributaba un emotivo reconcomiendo a María del Carmen González Herrero denominando honoríficamente con su nombre la Sala de Solfeo de la Escuela Municipal de Música de Olmedo 'José Martín Salamanca' por su entusiasmo, esfuerzo y dedicación, como profesora de dicha escuela municipal de música, creando entre los vecinos de de la Villa del Caballero una importante cultura musical.
Casi seis meses después tres de los colectivos musicales olmedanos, la Asociación musical Villa de Olmedo, la Banda de Cornetas y Tambores Oración del Huerto y el Coro de Villa y Tierra de Olmedo, con la colaboración del Ayuntamiento de Olmedo, tributaban en el Centro de Artes Escénicas San Pedro un caluroso y más que emotivo homenaje que reunió además de a su familia, a muchos compañeros profesores en la escuela de música durante estas tres últimas décadas en la que ha ejercido como docente, actuales y antiguos alumnos, vecinos en general, así como miembros de la corporación municipal.
Olmedana, trabajadora incansable y profesora volcada en la enseñanza musical de la Villa del Caballero desde bien joven, 'Carmina' como todos la conocen, que agradeció reiteradamente tantas muestras de cariño y admiración hacia su persona, empezó enseñando música en 1975 en su propia casa, si bien no fue hasta 1992 cuando se presentó a las pruebas de la escuela municipal donde fue seleccionada como profesora de solfeo y unos años después pasaría a impartir también y piano.
De aquel proceso selectivo recuerda con cariño una pregunta que la hicieron: «¿Porque quiere ser profesora de la escuela municipal de música?», a lo que ella contesto: «Quiero aportar a Olmedo todo lo que se de música para potenciar la cultura musical, pues aquí siempre había existido una banda y era una pena que se hubiera perdido». Deseo que tres décadas después ha visto cumplido con creces, dejando su huella musical en los cientos de alumnos que han pasado por sus manos en la citada escuela.
Entre sus aportaciones para aumentar la cultura musical en la villa destaca la creación del coro municipal en el que durante más de veinte años ha regalado un repertorio de piezas musicales, la celebración de la fiesta en honor a Santa Cecilia, su inestimable colaboración en el Curso de Iniciación al Órgano Barroco Español que cada año durante el mes de agosto organiza en Olmedo la Asociación 'Manuel Marín' de Amigos al Órgano de Valladolid, y su participación desde hace una década, como pianista y organista, en el Coro Villa y Tierra de Olmedo.
Vocación
La pandemia la hizo tomar una de las decisiones más difíciles de su vida, el de la jubilación, ya que como siempre dice, «para mí la música y la enseñanza musical no era un trabajo sino una vocación, pero en algún momento había que hacer un punto y aparte para disfrutar de la familia como hacía tiempo no la disfrutaba».
Por todo ello, como ya lo hizo el Ayuntamiento, las tres formaciones musicales de las que de alguna manera ha estado vinculada, han querido agradecer ahora a 'Carmina' su entrega y dedicación durante tantos años y sus muchas horas de trabajo. Pero sobre todo gracias por dejar en Olmedo un legado musical, una huella que durante mucho tiempo será difícil de olvidar.