Medina recortará un día el programa de la feria renacentista del próximo año

La feria renacentista Imperiales y Comuneros de Medina del Campo, que el próximo año cumplirá su octava edición, contará con un día menos de programación y pasará de los seis de esta edición a los cinco previstos para 2019, según informaron desde la organización, que mostró su satisfacción al conseguir el primero de los objetivos marcados para este 2018. «Estamos contentos con el desarrollo de la feria Imperiales y Comuneros porque hemos conseguido nuestro objetivo de ensalzar la fiesta histórica y huir de aglomeraciones, ya que en pasadas ediciones el municipio se colapsó y nos creó problemas de seguridad, por lo que este año hemos conseguido nuestro primer objetivo», explicaron desde el área de Desarrollo Local, concejalía encargada de reformar el formato de esta feria el pasado mandato, y que esta edición se ha celebrado durante seis días, dos más que en años anteriores.

A la espera de un análisis detallado de cada una de las actividades y jornadas festivas, la organización mostró su satisfacción con el resultado de los seis días de feria porque «hemos contado con el mismo público asistente que en otras ediciones pero repartido en más días, por lo que nuestro objetivo de no crear aglomeraciones se cumplió». Además de conseguir este propósito la organización destaca como días cumbre el sábado, cuando el municipio recreó La Quema de Medina con «un espectáculo que nunca antes se había realizado en ninguna parte de España, ya que combinamos la participación ciudadana con el 'mapping'. Todo el mundo nos comentó que ha sido una gran idea y estamos muy satisfechos», y el martes 14, día que arrancó toda la programación.

«Este año hemos conseguido mantener toda la oferta de actividades con un 10% menos de presupuesto, por lo que comprobar que todos los talleres y actividades estaban llenos, igual que la conferencia 'Los judíos en la España medieval', es muy positivo y nos lleva a pensar que estamos haciendo las cosas bien», comentan los organizadores, que añaden que «hemos desarrollado durante toda la feria más de 200 actividades y todas ellas repletas de gente».

Uno de los puntos que mayor afluencia de público ha tenido ha sido el Castillo de la Mota, emplazamiento hasta el que se han trasladado durante esta edición de Imperiales y Comuneros cientos de miles de personas. «Este año el palenque contaba con más plazas al aumentar el graderío y una vez más nos hemos quedado cortos. El Castillo se está convirtiendo en uno de los escenarios más importantes que seguro que nos dará para muchas más actividades de cara a la próxima edición».

La Feria Renacentista Imperiales y Comuneros, que ya es por méritos propios el mayor evento recreacionista de la provincia de Valladolid y de la Comunidad, cuenta con opiniones favorables y argumentaciones negativas. Son algunos los que apuntan que «este año han sido muchos días, y como no corten al final se cargan la feria porque había menos gente que otros años». En este sentido muchos de los hosteleros de la Plaza Mayor señalan que «este año fue un poco floja la cosa; quitando el sábado y el miércoles, que fue festivo, el resto de días no hemos tenido tanta gente como en otras ediciones». Tal es así que cifran la bajada en alrededor de un 10% menos de clientela.

No obstante, la realidad es que muchas de las terrazas, puestos de gastronomía y bares del municipio colgaron el cartel de completo durante el sábado pasado y durante la mañana del domingo, cuando la villa de las ferias recreó una vez más la llegada de Isabel y su hermano Alfonso a la localidad.

Con esta recreación histórica, ambientada en un capítulo que tuvo lugar entre 1470 y 1480 en la localidad, la feria Imperiales y Comuneros inició el último día de actividades.