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Una máquina devora a dentelladas la residencia de las Oblatas en La Rondilla
Los trabajos obligan a cortar provisionalmente también un carril de la Rondilla de Santa Teresa hacia el antiguo Río Hortega
Una potente cizalla hidráulica, acoplada a un enorme brazo mecánico, ha comenzado este miércoles a devorar literalmente a dentelladas la estructura de la antigua residencia ... de las Oblatas, un edificio de cinco plantas situado en el número 1 de la Rondilla de Santa Teresa, que los operarios prevén demoler por completo en tan solo una semana. El barrio dice adiós así a 44 años de historia de la congregación religiosa, que levantó el inmueble entre 1977 y 1978.
Su mudanza hace seis meses y su venta a una inmobiliaria certificó la marcha de las religiosa. Sobre el solar de la antigua residencia, que da a la parte posterior de la Casa del Sol, en Cadenas de San Gregorio, se anuncia ya la edificación de un bloque de 39 viviendas con garaje (tres plantas) y trasteros.
Los trabajos de demolición se están llevando a cabo con la citada cizalla, una suerte de pinza acoplada a un brazo mecánico, y con una segunda grúa de grandes dimensiones que mantiene suspendida una malla a modo de pantalla para evitar que los cascotes caigan sobre la vía pública.
Los trabajos, que se llevarán a cabo en horario de 8:00 a 19:00 horas, mantienen cortados los dos carriles en sentido al centro de la Rondilla de Santa Teresa, entre Cardenal Torquemada y Torrecilla, y puntualmente se ha cortado también el carril contrario (hacia el antiguo hospital Río Hortega), con las consiguientes retenciones en hora punta.
La demolición del edificio y la posterior retirada de los escombros se prolongarán durante las próximas dos semanas.
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