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Los vecinos del barrio de Los Santos-Pilarica se han despertado este lunes, 5 de mayo, con un inquilino sorpresa. Un corzo irrumpió de forma ... inesperada en una zona urbanizada de la capital del Pisuerga y se quedó atrapado en un solar vacío.
Hasta la zona, comprendida entre las calles Cosmología, y Magallanes, se trasladó una unidad de la Policía Municipal para asegurarse de que el animal no saltara la zona vallada y emprendiera una huida por las carreteras del barrio, lo que podría haber provocado problemas de tráfico o daños materiales.
Junto a los agentes de policía acudieron una unidad de bomberos y agentes para tratar de ayudar al corzo a salir del solar donde se encontraba atrapado. Aunque en un principio mostró una actitud esquiva, finalmente lograron capturarle. Tras atenderle en el lugar, ya que presentaba pequeñas heridas en el cuello a causa de un roce con una de las vallas del solar, fue puesto en libertad y devuelto a su entorno natural.
Una situación atípica que reunió a muchos vecinos que, con curiosidad, se acercaron hasta el lugar e intentaron, sin éxito, colaborar en las labores de rescate. Finalmente, a los pocos minutos, todo acabó sin que nadie haya resultado herido ni se hayan producido daños materiales.
No es la primera vez que los corzos irrumpen en la ciudad. Por ejemplo, en abril de 2021 agentes de las policías Local y Nacional protagonizaron una inusual persecución por las calles de la capital para capturar un corzo, que fue detectado cuando corría entre los coches, con el consiguiente riesgo para los conductores y para el propio animal, por una de las principales arterias de la ciudad, el paseo de Zorrilla. El animal entró en Valladolid también por el barrio de Pilarica y, tras atravesar el paseo Juan Carlos I, llegó a Arco de Ladrillo y Puente Colgante antes de enfilar el Paseo de Zorrilla hacia La Rubia. Los agentes lograron capturarlo al final de Covaresa, entre la vía y la ronda exterior. Fue un recorrido de cinco kilómetros en los que no hubo que lamentar daños.
Una situación similar se vivió en abril de 2020, aunque en un contexto muy diferente, en plena era covid. El animal se paseó por una capital casi desierta por el confinamiento. Fue visto entonces deambulando entre Parquesol y el cruce del Paseo de Zorrilla con la calle Puente Colgante.
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