Jesús Hernández Sahagún, el gran «enchufado» de la Virgen
«Dios siempre perdona», repetía desde su pequeño cubil de la Seo vallisoletana cada vez que sanaba un alma desgarrada o reparaba un corazón roto
Carlos Lora González
Abogado y cofrade de la Cofradía Penitencial de Nuestra Señora de las Angustias
Miércoles, 28 de junio 2023, 10:15
Me lo ha contado la Virgen -me dijo don Jesús, clavando en mí sus pequeños ojos saltones llenos de paz-. No me sorprendió la respuesta. ... Minutos antes me explicaba cómo, a pesar de su convalecencia, había podido casar a su sobrino José. «Ha sido un regalo de la Virgen», sonreía Jesús Hernández Sahagún, desbordante de felicidad.
Todo eso era verdad. Don Jesús vivía metido en Dios, al que llegaba por María. Por nuestra querida Virgen de las Angustias, a cuyo Encuentro no faltaba cada Semana Santa. Por la Virgen de Fátima, de cuyo Apostolado Mundial fue consiliario en Valladolid. Por Nuestra Señora del Carmen de Garabandal, a cuya encomienda urgía cuando se necesitaban favores del Cielo.
Inspirado por la Virgen, don Jesús tenía la capacidad de dar grandes lecciones en breves palabras. «Dios siempre perdona», repetía incansable desde su pequeño cubil de la Seo vallisoletana cada vez que sanaba un alma desgarrada o reparaba un corazón roto. «El demonio no perdona», advertía cuando se acudía a su consejo para combatir el Mal. «Dios siempre puede más», sentenciaba al desahogar en él los nudos que atenazaban el espíritu.
Don Jesús ofreció su vida a Dios, y tuvo la suerte de recorrer ese camino de la mano de nuestra Madre del Cielo. Ahora, en el Cielo, intercede junto a Ella por todos nosotros.
«Me lo ha contado la Virgen», me dijo don Jesús, clavando en mí sus pequeños ojos saltones llenos de paz. «No me extraña», le repliqué. «Usted es el gran enchufado de la Virgen».
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