La artesanía y el folclore soplan 15 velas en el mercado de Tordehumos

Doce expositores. Ni uno más ni uno menos. Una docena de artesanos de la comarca fueron los encargados de arrancar en el año 2000 con un mercado artesanal al que destinaron ilusiones y esfuerzo la oficina de turismo y el CDR El Sequillo. Ese primer año y el siguiente, el escenario elegido fue el Ecomuseo, su patio.

Pero la repercusión obtenida, con una gran selección de calidad, pronto les obligó a trasladarse al entorno de la iglesia de Santiago y la Plaza Mayor. Quince ediciones alcanzadas, las que soplan este fin de semana, en la que han tenido que cribar medio centenar de expositores entre más de un centenar de solicitudes. ¿Su secreto? Calidad y organización.

«Siempre tuvimos claro que íbamos a apostar por los oficios tradicionales y el folklore, que queríamos huir de la temática medieval», asegura el responsable del CIT, Mirador de Campos, Gustavo Hernández, quien afronta su último año como coordinador del mercado.

La artesanía es así una de las apuestas, con un fuerte carácter local y regional, donde no pueden faltar por ejemplo el jamón de Guijuelo, y la alfarería de Pereruela o Portillo, pero donde los expositores de fuera de la región representan ya un 40%.

«Se da prioridad a los de otros años, pero siempre queda un bloque de unos veinte libres que por motivos diversos no pueden acudir. Esas se sacan a promoción y se adjudican entre los interesados», añade Hernández. Eso sí, siempre cuidan que no haya más de tres artesanos por cada especialidad.

La artesanía vendrá así un año más maridada con el folklore. Por las calles y plazas de Tordehumos han pasado grupos de hasta siete Comunidades Autónomas distintas. Este año les tocará el turno dentro del Encuentro de Danzas a Oter de Fumos y Zarabandos, locales; al grupo de danzas de Prádena-Segovia y al de Castro-Floxo, de Orense.

Además, el sábado por la noche el grupo salmantino Mayalde se encargará de protagonizar el concierto en la Plaza Mayor.

Nuevos actos

Las novedades para esta XV edición llegarán, primero, de la mano de la denominada Ludoteca Artesanal, que ofrecerá siete talleres de fundido en aluminio, alfarería de Portillo, trabajos en madera, grabado en tinta, trabajos en cuero, bolillos y adobera para que el público visitante, especialmente el familiar, pueda participar. «Se ve, pero también se toca», recuerda el presidente del CIT como uno de los lemas de este mercado.

El Foro Espacio Santiago proseguirá con la idea de promocionar productos alimentarios como queso o miel, pero incluirá charlas sobre artesanía y oficios tradicionales. A ello se sumará la recogida de productos para el Banco de Alimentos y sorteos de lotes por cada diez euros de compra con el objetivo de animar el consumo.

En total, aunque huyen de cifras, la organización, que recae en el CIT Mirador de Campos, con la colaboración del Ayuntamiento y varias asociaciones de la localidad, estima en unos 10.000 los visitantes que puede atraer este mercado en sus dos días de celebración. Una cita «en la que la gente de la zona ha tomado conciencia de que hay que ir a Tordehumos y en la que los hijos del pueblo regresan como si fuera una fiesta más», concluye Gustavo Hernández.