'Limpio y ordenado' con Laura Cáneva: cómo cuidar las mascarillas
«Se puede ir a la moda y cumpliendo con las normas de seguridad y de salud»
Pandemia mundial. ¿Quién nos iba a decir esto hace un año, cuando pensábamos en lo maravilloso que sería el 2020, por ser año par y ... tan redondito? Bueno, pues algo se torció y ha hecho que nuestra vida cambie por completo y nos dé una vuelta.
Nuestras preocupaciones han cambiado, ahora la salud es lo primero más que nunca y hemos tenido que adaptarnos a un nuevo complemento en nuestra vida diaria: la mascarilla.
Algo tan inusual, resulta que es obligatorio y que nos protege de ese bicho que no queremos coger, y la imagen en las calles es de gente enmascarada, así que tendremos que ponernos a la moda y con seguridad.
Encontramos en el mercado diversidad de opciones.
Están las mascarillas quirúrgicas, que son sencillas, aunque cada vez las hay de más colores. Recomiendan utilizarlas máximo cuatro horas y son desechables.
Las FFP2 son otro tipo, que también son desechables, pero por su escasez hay quien dice que se podrían reutilizar, si se someten a temperaturas de 70 grados de calor seco durante al menos 30 minutos.
Lo cierto, es que los precios de estos tipos de mascarillas han crecido exponencialmente con la necesidad de su uso.
Luego tenemos las mascarillas caseras, que si se ponen filtros específicos pueden hacer su función, tipo telas TNT, y estas sí que habría que lavarlas a 60 grados en la lavadora.
Y como no podía ser de otra forma, se han creado varios negocios de mascarillas homologadas con dibujos, diferentes tejidos, modelos y formas.
Y surgen cosas nuevas para complementar a todo lo anterior, porque vaya la que se lía cuando vas con la mascarilla. En muchos casos las gomas no ajustan bien y hay unos pequeños apliques que permiten ajustar, valga la redundancia, la goma de la mascarilla a la medida que necesites. O los adaptadores para que no sufran las orejas, y puedas llevar la mascarilla colocada con las gomas ahí sujetas por el cuello.
Y si vas a comer en algún restaurante y te la tienes que quitar ¿qué haces con ella?
Puedes guardarla doblada en un pañuelo o utilizar una cajita de plástico, también hay bolsas a juego de tela e incluso bolsas de papel, para proteger la mascarilla y tu bolso y que no se infecte de virus. Cualquier precaución es poca.
Otro inconveniente es que se empañan mucho las gafas, por eso han inventado unas gamuzas para evitar el vaho durante varias horas.
Lo último que me ha pedido mi hija, son unos cordones como los de las gafas, para cuando come el almuerzo en el cole, poder dejar la mascarilla colgando, que no sé yo si eso es muy higiénico, porque dejas los virus ahí colgando.
Quizá se me olvide alguna cosilla más, pero es todo tan nuevo y cada día nos sorprenden con algo que seguiré informándome.
Lo único que te pido es que seas riguroso y te informes bien de lo que estás usando, tu salud y la de los demás está en juego.
Se puede ir a la moda y cumpliendo con las normas de seguridad y de salud.
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