Cupido viajó en autobús
El alcalde de Villafrechós se casará el 30 de abril con Gabriela Folchieri, cinco años después de conocerse en el 'Encuentro del amor'
LORENA SANCHO
Domingo, 13 de marzo 2011, 11:04
A la italo-argentina Gabriela Folchieri la vida le dio un giro de 180 grados el 6 de mayo del 2006. Ese día llegó a Villafrechós procedente de Venecia para atender la llamada lanzada por el Ayuntamiento y la propietaria del restaurante El Atrio, Teresa Canal: la legión de solteros de la comarca necesitaba mujeres para insuflar vida a una zona que avistaba su fecha de caducidad. Y surgió el 'Encuentro del amor y la amistad', lo que en el pueblo oscense de Plan vinieron a bautizar en 1985 como Caravana de Mujeres, pero adaptado a los nuevos tiempos.
«Mi hermana vio la noticia en el periódico cuando yo estaba con ella de vacaciones en Canarias. Me convenció y me animé, porque pensé que era una forma de conocer otras partes de España en las que nunca había estado», narra Gabriela. El 6 de mayo se plantó en la vallisoletana Plaza de Poniente y tomó uno de los autobuses que llevó a un centenar de mujeres hasta Villafrechós. El páramo terracampino se antojaba propicio para conocer gente nueva alejada de los flechazos.
«No soy de amor a primera vista», dice. Pero ahí conoció a Miguel Ángel Gómez, el alcalde, una persona que de entrada le pareció «muy agradable» y con la que pronto conectó. Cupido viajaba en aquel autobús.
Casi cinco años después, el próximo 30 de abril, Gabriela y Miguel Ángel se darán el sí quiero en el altar de la iglesia de San Cristóbal. Será el capítulo más importante de una historia de amor casi televisada desde el principio, cuando cámaras de Brasil, Alemania, Polonia y China emitieron para medio mundo las imágenes de este 'Encuentro del amor'. «No nos esperábamos la repercusión mediática que tuvo, nos llamaron de medio mundo», dice ahora el alcalde, a punto de dejar la soltería.
En los planes de Miguel Ángel no entraba enamorarse. Se inscribió en el 'Encuentro del Amor' para alcanzar el mínimo de participantes, pero una llamada de Gabriela lo cambió todo. «Pocos días después de celebrar el Encuentro, llamó para agradecer y felicitarme por lo bien que había salido todo. Entonces yo tenía la imagen de que era una persona especial, nos intercambiamos teléfono y correo electrónico y empezamos a hablar, a escribirnos, y hasta hoy». Su historia de amor pronto centró los objetivos de publicaciones en aniversarios, suscitó el interés de televisiones ávidas de relatar este encuentro y levantó la curiosidad de viandantes que llegaron incluso a reconocerles en ciudades como Madrid y Zamora. Gabriela, profesora en Venecia, aparcó a los pocos meses su vida en Italia para apostar por la Tierra de Campos, donde dice haber encontrado un lugar mágico para vivir. Aquí tiene ya una vivienda recién construida con su futuro marido y hace un par de años aprobó una plaza como profesora en un instituto de la capital. «Me hicieron un favor grandísimo con el Encuentro del Amor y la Amistad, conocí a Miguel Ángel, encontré a mi pareja», dice mientras busca la mirada cómplice de su prometido.
Al menos, tres
Unos ochenta invitados serán testigos del enlace, de los frutos que dio una de las iniciativas más afamadas de cuantas ha programado Villafrechós en su historia más reciente. Aunque no es el único, previamente, y según le consta al alcalde, se han registrado al menos otras tres bodas de hombres de Villafrechós y comarca que encontraron su media naranja en una caravana del amor que dio la vuelta al mundo. «Sí ha dado resultado y lo más importante es que demostramos que si se quiere hacer algo por potenciar la zona se puede hacer», dice ahora el alcalde.
El amor se propagó así durante la fructífera jornada de aquel 6 de mayo en la que participaron 92 mujeres y 53 hombres. Tanto que el alcalde cuenta como anécdota que hasta una pareja de periodistas franceses que habían roto «se volvieron a juntar ese día». Ahora, con su ejemplo, él se erige en defensor de una iniciativa que arrojó resultados. «Gracias a Gabriela ha cambiado mi vida, ahora tenemos un proyecto de vida en común, nos hemos construido nuestra propia casa y he podido descubrir con ella lugares como Argentina e Italia, donde vive su familia». ¿Programar un nuevo Encuentro? «Si hubiera un clamor popular de hacer uno se haría, pero tiene que existir la necesidad, que sean los solteros los que quieran hacerlo».