Muere un hombre tras ser succionado por una resonancia magnética mientras ayudaba a su esposa
El incidente ocurrió cuando entró en la sala de escaneo con un collar metálico de entrenamiento de aproximadamente 9 kilos
D. F.
Lunes, 21 de julio 2025, 16:46
Un hombre de 61 años ha muerto en el centro médico Nassau Open MRI, ubicado en Westbury, Long Island (Nueva York), tras ser succionado por una máquina de resonancia magnética.
El incidente ocurrió cuando entró en la sala de escaneo sin autorización, mientras la máquina estaba en funcionamiento, y llevaba un collar metálico de entrenamiento en la cintura de aproximadamente 9 kilos que utilizaba para hacer diferentes ejercicios. La potente fuerza magnética lo atrajo violentamente, lo que le provocó lesiones fatales.
Según el Departamento de Policía del condado de Nassau, el hombre entró a la sala para asistir a su esposa, quien se estaba realizando una resonancia de rodilla. Al ver que ella no podía bajar de la camilla, él entró en la sala portando la cadena metálica. En ese momento, la máquina lo giró y lo arrastró hacia adentro, lo que le ocasionó un impacto contra el equipo, lo que le provocó un paro cardiaco.
La esposa, identificada como Adrienne Jones‑McAllister, relató con angustia que él la sostuvo brevemente, le dijo «adiós» con la mano y después se quedó completamente inmóvil en sus brazos. A pesar del esfuerzo del personal para sacarlo y trasladarlo al hospital, falleció al día siguiente.
Este accidente vuelve a poner en evidencia el peligro del llamado 'efecto misil' en las salas de resonancia magnética. Estos equipos generan campos magnéticos miles de veces más intensos que el de la Tierra, capaces de atraer objetos metálicos con gran potencia. Por ello, la normativa exige retirar todos los objetos metálicos —joyas, relojes, implantes, ropa con fibras metálicas— antes de ingresar. En este caso, se investiga cómo pudo acceder a la sala con una cadena tan pesada y sin supervisión.
