Las obras de la calle Segovia en Cuéllar obligan a reorganizar el tráfico en todo el barrio de El Salvador

Hoy comienza la primera fase de las obras, que afecta al tramo comprendido entre las calles Vacas, Arévalo, Plaza de la Cruz y Medina, y que implica una reorganización del tráfico total en la zona. Así, los vecinos de la calle Medina deberán realizar el acceso y la salida por la propia calle Segovia, desde la Ronda de San Bartolomé o calle Trinidad, puesto que de momento no se actuará sobre ese tramo, cuyas obras se llevarán a cabo en una segunda fase.

Respecto a la calle Vacas, el acceso a los garajes se podrá realizar desde la calle Achicorera, mientras que en el caso de Diego Velázquez se invierte el sentido de circulación, quedando desde la plaza de la Cruz hacia calle Chorretones. La plaza de la Cruz tendrá un único acceso por la travesía de la plaza de la Cruz y la salida será exclusivamente por Diego Velázquez.

A la plaza del Salvador se permitirá la entrada desde la misma hacia la calle Arévalo, Estribos y calzada de San Isidro, que, en principio, mantienen la señalización actual, aunque podría haber cambios dependiendo de la evolución de la obra, según informa la jefatura de la Policía Local.

Así, todo el tráfico que habitualmente transcurre por la calle Segovia, que supone uno de los enlaces entre las zonas norte y sur de la localidad, tendrá que ser absorbido por la calle Nueva o bien por el barrio Valdihuertos, al menos hasta el 8 de enero, fecha prevista para la conclusión de estas obras que ejecutará la empresa Padecasa y que tendrá un coste final de 192.719,20 euros.

Aunque la obra se realizará de forma continua en el tiempo, se ha establecido su ejecución en fases para poder ofrecer alternativas de acceso y salida a la calle Medina. Una vez que la primera fase se encuentre concluida, incluso con el adoquín colocado, comenzará la segunda fase, que se prolongará desde el entronque de la calle Medina con la calle Segovia hasta su unión con la calle Trinidad, donde se podría realizar una tercera fase para realizar los últimos tramos, que corresponderían al entronque con la Ronda de San Bartolomé, según detalló el concejal de Urbanismo, Joel Velasco.

El edil apuntó que cuando esté concluida la primera fase, el tráfico volverá a cambiar, puesto que los vecinos de la calle Medina accederán o saldrán por la calle Segovia en sentido sur, es decir, hacia la plaza del Salvador, que se tendrá que abrir a ambos sentidos o bien ascender por la calzada de San Isidro. También se estudió la posibilidad de abrir un camino por la parte posterior de calle Medina, puesto que únicamente existe el acceso de la calle Segovia, aunque finalmente se desestimó.

Velasco también apuntó que las obras de la plaza de La Soledad, también previstas para este último cuatrimestre del año, aún tardarán en comenzar, puesto que el primer paso será la realización de unas catas arqueológicas, y dependiendo de los informes de los especialistas, deberá pasar por la comisión de patrimonio, por lo que su inicio se podría prolongar aún varios meses.

La obra en la calle Segovia pretende el diseño de una calzada que pueda asumir de manera coherente el tráfico que va a soportar y la adecuación de las aceras, dotándolas de mayor dimensión que la actual, ya que en algunos tramos son incluso inexistentes y en general se encuentran en muy mal estado, para permitir la coexistencia del tráfico rodado y peatonal.

Se pretende dotar al espacio urbano de una imagen renovada y moderna, ya que supone uno de los puntos estratégicos de Cuéllar por su potencial como arteria de comunicación entre equipamientos y vial de comunicación entre muchas calles.

Para ello se creará un vial de coexistencia con la acera al mismo nivel que la calzada, para que se eliminen barreras y se pueda aumentar la superficie para los usos de vehículos y peatones. También se soterrarán todas las instalaciones que actualmente van por las fachadas y se renovarán. El ámbito de actuación en su conjunto tiene una superficie de 1.668 metros cuadrados.