Los niños de Cuéllar disponen de dos áreas nuevas para los juegos

El concejal de Medio Ambiente, Tomás Marcos, apuntó que en ambos espacios se encontraban ya otros juegos, pero muy deteriorados. De hecho, en el caso de la carretera de Bahabón, los columpios que existían en el lugar se eliminaron hace tiempo por motivos de seguridad y deterioro. También se han quitado de su lugar los que se encontraban en los paseos de San Francisco, junto a la escultura dedicada a los encierros, donde «hemos tenido que quitar todos, e incluso el columpio no lo hemos podido aprovechar», apuntó.

Es por ello que en esta última zona se ha optado por la instalación de un columpio convencional, para dos niños, además de un cubo de juegos, relacionado con distintas habilidades de escalar, trepar, con anillas, cuelgues, tubos, escaleras, paredes y cuerdas, para que los más pequeños puedan disfrutar de una diversión que va más allá de los tradicionales columpios y toboganes. En el caso de la zona de la cañada de la carretera de Bahabón, se ha realizado una instalación similar, aunque de mayor tamaño, con algún elemento más para trepar y una escalera para ascender y poder bajar por un tobogán. Aunque solo se ha incluido un elemento, dispone de más juegos de habilidad.

La instalación de ambas zonas de juegos ya está concluida, pero el hormigonado de las zapatas de las instalaciones requiere un completo secado, por lo que el edil de Medio Ambiente pidió especial precaución y que los columpios no se utilicen hasta que no se retire la correspondiente señalización. Tras ello, en ambos casos se rellenarán las zonas con arena, para que exista una base de suelo blando. Marcos apuntó que «esperamos que los disfruten todos los niños de Cuéllar» de estas instalaciones, que, en su conjunto, han tenido un coste cercano a los 15.000 euros. Estos trabajos continuarán el próximo año si el presupuesto se aprueba.