Momentos de recuerdo y homenaje
Cuéllar ·
La plaza de toros recuerda al primer toro indultado en Cuéllar con una placa, y los amigos de Borja del Olmo le rindieron un tributo taurinomónica rico
Cuéllar
Jueves, 31 de agosto 2017, 12:11
Aunque las fiestas de Cuéllar son días de diversión y alegría, la villa también tiene momentos para el recuerdo y el homenaje. Lo hicieron el pasado lunes los caballistas con la fotógrafa Mayte García, fallecida hace unos meses; la noche del pasado martes recortadores amigos del joven Borja del Olmo, también fallecido este mismo año; y lo hizo ayer el Ayuntamiento recordando a Orégano, el toro de Lagunajanda indultado el año pasado, que ostenta el título de primer toro indultado en el coso taurino de la localidad.
Fue el concejal de Festejos, Luis Senovilla, el encargado de abrir el acto de recuerdo a Orégano, que cuenta con un azulejo conmemorativo en uno de los pasillos de la plaza. Entre los asistentes, la ganadera de Lagunajanda a la que pertenecía el astado, María Domez, el presidente del festejo del indulto, Javier Fernández, el alcalde de la villa, Jesús García, junto a varios concejales y aficionados al mundo del toro. El edil apuntó que con esta acción se pretende seguir completando la historia en torno a la plaza y al mundo taurino de la villa. Además recordó lo vivido el día 31 de agosto del año pasado con Orégano, al que calificó de «extraordinario», señalando que fue a más, tuvo un recorrido excelente, además de presencia, seriedad y cuajo, señalando que «fue la guinda a una obra sentida de David Mora», que no pudo llegar a tiempo al homenaje, y que en su faena tuvo relajación y empaque. «Mora firmó una faena importante», aseguró, apuntando que el toro se creció, humilló con una embestida muy encastada y que el público se entregó cuando el torero se relajó, «sobre todo al natural». «La petición fue unánime cuando el torero fue a por la espada, y el presidente sacó el pañuelo naranja», que marca el indulto del astado.
Senovilla recordó que la tarde fue grande, porque también triunfaron Curro Díaz y Javier Herrero, que completaban el cartel y que ofrecieron sus credenciales, cerrando un festejo con seis orejas, un rabo, un indulto y una triple puerta grande. Junto a ellos el protagonismo fue de los toros de Lagunajanda, ganadería que pasta en Vejer de la Frontera, con divisa blanca y roja y señal orejisana en ambas. Su representante es María Domeq, ganadera que estuvo presente en el acto y que agradeció el gesto surgido del Ayuntamiento señalando que ya se siente un poco de Cuéllar «porque tengo aquí el recuerdo de mi toro».
También tomó la palabra el que fue presidente del festejo ese día, Javier Fernández, que se mostró conocedor de que fue una decisión un poco controvertida, pero que se reafirma con que Orégano fue declarado el mejor toro de la feria. A su juicio el indulto fue merecido y recordó la peculiaridad del encierro de Cuéllar, el recorrido de siete kilómetros que realizan los toros y el gran lucimiento del astado después de recorrer pinar, campo y calles por la mañana. Seguidamente, María Domeq se encargó de descubrir la placa que recordará a Orégano en la plaza. Para concluir el acto se celebró un recital de poesía con temática taurina.
Plagada de recuerdos estuvo también la noche del martes (tras tener que suspender el lunes por la lluvia), en la plaza de toros de la villa, donde amigos cortadores del joven corredor y cortador cuellarano Borja del Olmo, fallecido hace unos meses, le rindieron homenaje en forma de exhibición, como no podía ser de otra forma. Con el ruedo en mal estado debido al agua caído durante la tarde, los jóvenes amigos no quisieron dejar pasar más tiempo para recordar al ‘Rulox’, como popularmente le llamaban. Cortadores locales y llegados desde distintos puntos del país salieron al ruedo a realizar sus mejores quiebros y recortes, en memoria del joven, ante los aplausos de gran cantidad de público, que aguantó de forma estoica la lluvia que arreció con fuerza.