Segovia
Los guías turísticos rechazan ser sancionados por infracciones cometidas por sus clientesEl sector exige extender la nueva regulación de las visitas a grupos escolares, clubes deportivos o despedidas de soltero
Los guías turísticos de Segovia se oponen a asumir las sanciones por los comportamientos indebidos que protagonicen sus clientes. El sector duda de la viabilidad ... de algunas propuestas que están incluidas en la nueva regulación de las visitas a su paso por la ciudad, que ha recibido un total de 39 alegaciones y contempla la reducción del tamaño de los grupos a 30 personas o el mantenimiento de una distancia mínima de 50 metros entre los diferentes conjuntos de participantes en el itinerario, entre otras medidas. «Nosotros no somos los enemigos», defiende el gremio.
El atractivo turístico de Segovia ha contribuido al impulso de diversas ramas de actividad dirigidas al ocio de los viajeros. Son miles de personas las que llegan cada año a la ciudad para conocer los secretos y riqueza patrimonial de la ciudad. Esto ha supuesto una ampliación de los itinerarios disponibles para realizar una visita por el casco histórico, lo que provoca «aglomeraciones excesivas» en algunos puntos y desencadena el malestar entre los viandantes. El Ayuntamiento ha optado por poner límites a estos recorridos, lo que supone la introducción de cambios en la labor de los guías.
La Policía Local de Segovia podrá solicitar el carné oficial de guía turístico para evitar el intrusismo en el sector
La nueva ordenanza, cuyo periodo de consulta pública finalizó estos días, regula las visitas con el objetivo de «garantizar la protección del patrimonio, la convivencia de residentes, el orden en la vía pública y la calidad del servicio turístico». Los ciudadanos han trasladado diversas sugerencias que cuestionan algunos aspectos de la normativa. La mayoría de los que han presentado alegaciones son integrantes de la Asociación de Guías de Turismo de Segovia, aunque también figuran profesionales de otras comunidades autónomas vecinas, como es Madrid.
Hay algunas iniciativas que han recibido con los brazos abiertos, entre las que sobresale el mayor control que se efectuará sobre aquellas personas que no van identificadas como guías habilitados. «Llevamos más de 20 años pidiéndolo», se puede leer en una treintena de alegaciones. Uno de los problemas más graves a los que se efrenta el sector es el intrusismo, por lo que la Policía Local de Segovia tendrá autoridad para solicitar el carné oficial a los profesionales y asegurar el cumplimiento de las normas.
Otra de las sugerencias que más se ha repetido es que los guías turísticos oficiales que enseñan Segovia a los turistas deben contar con habilitación de las diferentes regiones del país e instan a que el personal de la Empresa Municipal de Turismo no esté exenta de adaptarse a las exigencias de la normativa, ya que en un principio se contemplaban ciertas excepciones, lo que consideran que podrían constituir competencia desleal.
Medidas polémicas
Hay algunos puntos que han abierto la polémica. El primero de ellos y más importante tiene su origen en es la definición de un régimen de sanciones, algunas de ellas muy cuantiosas, para los guías en caso de cometer infracciones previstas en la ordenanza, como es no respetar la distancia mínima aconsejada, obstruir zonas de paso, dificultar la entrada a viviendas o comercios e, incluso, utilizar megafonía con altavoces en vez de radioguías.
En este sentido, los escritos enviados al Consistorio en el periodo de consulta pública consideran que el guía debe asumir la penalización siempre que «dependa de él o ella», pero no «se le puede hacer responsable de lo que hagan sus clientes». A su juicio, cada cliente es adulto responsable de sus actos y, por este motivo, la multa sería para quien incurre en un comportamiento indebido. «Los guías pueden avisar y recomendar, pero nunca prohibir; no podemos ser los subsidiarios judicialmente», coinciden las alegaciones.
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El borrador de la normativa prevé reducir el tamaño de los grupos a un máximo de 30 personas para evitar el colapso en las calles del recinto amurallado, especialmente en el eje Acueducto-Catedral-Alcázar. Los ciudadanos que han presentado sugerencias rechazan esta medida o, en caso contrario, exigen ampliar el límite a 40 integrantes. Los argumentos con los justifican esta decisión es la necesidad de evitar el desdoblamiento de los conjuntos de turistas porque los extranjeros suelen venir con un solo intérprete y no hay suficientes guías para atender el doble de servicios, lo que puede derivar a su vez en la decisión de no contratar a ningún profesional por el aumento de los precios.
«El límite puede desembocar en que los organizadoras decidan no visitar Segovia», advierten en las alegaciones. Asimismo, insisten en que es una obligación que se debe trasladar a otros grupos que contribuyen a su vez al «colapso» la ciudad, como son los escolares, las excursiones de personas mayores, los clubes deportivos, los participantes en gymkanas y en las visitas realizadas por el llamado arriero Claudio o las despedidas de soltero.
Reivindicaciones
La Asociación de Guías de Turismo de Segovia, que defiende la función de los profesionales como embajadores de la ciudad, duda sobre la posibilidad de mantener la distancia mínima de 50 metros entre grupos. «Es una medida absurda e inviable», subraya uno de los escritos remitidos al gobierno municipal. Si esta condición finalmente se pone en marcha, el sector propone habilitar una zona en el Acueducto para los turistas que deban esperar su turno para poder acceder al casco histórico.
Hay acuerdo en el uso de radioguías para evitar la contaminación acústica, pero determinan que no es necesario en el caso de las visitas con pequeños grupos, es decir, de menos de 15 personas, y sobre todo si hay menores de 15 años. A través de las alegaciones, el gremio apela al sentido común a la hora de redactar esta ordenanza, lo que implica descartar los requisitos que son «difíciles de cumplir».
Este periodo de consulta pública se ha constituido a su vez como un espacio abierto para recoger las reivindicaciones que realizan los profesionales para la mejora de la situación turística en Segovia. Hay algunas iniciativas que señalan como fundamentales a la hora de establecer un equilibrio entre el turismo y el bienestar de la comunidad local. En primer lugar, la apuesta pasa por la dotación de infraestructuras, como son baños públicos fuentes y zonas sombreadas; la mejora de servicios, como son los taxis; o extremar la vigilancia ante algunas actitudes, lo que se relaciona directamente con la presencia de carteristas en los espacios más frecuentados por los visitantes.
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