La falta de personal atasca en Segovia la revisión de edificios con más de 40 años de antigüedad

La Concejalía de Urbanismo del Ayuntamiento de Segovia se ha puesto deberes para la vuelta al trabajo después de las vacaciones de verano. A través de la empresa municipal de suelo y vivienda (Evisego) se ha propuesto «relanzar» las inspecciones técnicas de edificios (ITE), asegura el edil responsable del área, Alfonso Reguera. El Consistorio no ha podido cumplir como hubiera deseado con esta evaluación necesaria y obligatoria de los inmuebles que han cumplido ya cuarenta años de antigüedad.

Estas revisiones están prácticamente paradas desde hace tiempo. Reguera explica que el Ayuntamiento ha ido registrando las inspecciones que comunidades de propietarios y particulares han realizado desde que entrara en vigor la norma. De ello hace siete años, ya que la ordenanza municipal data de 2011.

Los expedientes «se han recibido de forma voluntaria», precisa Reguera, lo que quiere decir que el Consistorio no ha ejercido presiones ni ha emitido requerimientos, ya que son los propietarios los que han de contratar a los técnicos competentes y los principales beneficiarios de realizar la ITE. Para los dueño, esa evaluación supone conocer el estado real en el que se encuentra su inmueble, amén de cumplir con una obligación que está regulada.

Los análisis de las inspecciones recogidas se ha ido haciendo como y cuando se ha podido, en función de la capacidad de la unidad de disciplina urbanística. Alfonso Reguera lamenta que «ha sido imposible la contratación de más personal» para poder ir más al día. Por otra parte, recuerda que en los dos primeros años y medio, la aplicación de la normativa estuvo también algo parada debido a las modificaciones que se fueron introduciendo.

Sea como fuere, la intención del Ayuntamiento es «relanzar este año las inspecciones técnicas de edificios». El concejal señala en rojo el mes de septiembre como el elegido para dar ese nuevo impulso a la aplicación de la norma vigente que regula la obligación de la evaluación periódica del estado de conservación de las construcciones y determinar las obras y trabajos de necesarios de mantenimiento.

La manera de hacerlo será mediante «un mandato», cuyo contenido está en fase de preparación y que corresponderá a la empresa municipal de suelo y vivienda llevarlo a cabo.

El edil de Urbanismo agrega que «tiene que haber una relación de edificios con más de cuarenta años de antigüedad» para poder materializar esa voluntad de desatascar las ITE y las evaluaciones aparejadas. Inicialmente, el Ayuntamiento de Segovia «mantiene la administración» de los expedientes en cuanto a su recepción y por si hay que efectuar una reclamación a alguna comunidad de vecinos o iniciar la adopción de medidas revisoras en el caso detectar fallos en las estructuras o deficiencias de conservación.

El último dato oficial del que dispone el Observatorio de Inspecciones Técnicas de Edificios sobre Segovia es de 2015. Para ese año había 267 inmuebles en la capital obligados a pasar la revisión por cumplir los requisitos de antigüedad. Se tramitaron o registraron solo once expedientes, por lo que quedaron pendientes 256 inspecciones.

Cabe recordar que el padrón de edificios de la ciudad de Segovia que acumulan más de cuarenta años desde su construcción fue aprobado de forma definitiva en el mes de julio de 2012. En ese ejercicio se incluyeron todas las edificaciones que superaban el límite de antigüedad marcado por la norma, que además ya tenían entonces la obligación de someterse a la ITE en un plazo de cinco años. Dicha lista se elaboró sobre un total de inmuebles susceptibles compuesto por 2.478 edificios y 10.480 viviendas.

Desde entonces, esa presentación voluntaria de las inspecciones por parte de propietarios particulares o comunidades de vecinos ha hecho que se descuenten unas 600 evaluaciones. Al inicio del año en curso, la bolsa de revisiones previstas la conformaban unas 1.850 solo en la capital segoviana. Se habían realizado 225, siendo el municipio con más de 20.000 habitantes de Castilla y León que registra la peor ratio de cumplimiento de la normativa. Por otra parte, 197 inmuebles aprobaron el examen técnico, lo que supone que más del 87% de los edificios inspeccionados superaron la prueba y obtuvieron el informe favorable.

Las modificaciones que se introdujeron al marco regulador ampliaron el radio de acción de la inspección a otros municipios en función de su tamaño. Así, en la provincia de Segovia, y a raíz de un decreto de marzo de 2016, también El Real Sitio de San Ildefonso y Palazuelos de Eresma están sometidos a la ITE completa al ser términos de más de 5.000 habitantes incluidas en un área funcional estable.

Por su parte, dentro de los municipios obligados a la inspección técnica parcial están El Espinar, Cuéllar, San Cristóbal de Segovia y La Lastrilla por tener una población igual o superior a los 5.000 residentes o por presentar padrones de 2.000 vecinos o más y estar incluidos en un área funcional