Los encierros se saldaron con tres multas por acompañar a pie la manada
El foro propone mejoras para los traslados y carreras del ciclo cuellarano
Como es habitual después de cada ciclo de encierros, la peña taurina El Encierro organiza un foro de debate para analizar la organización y el ... desarrollo de los traslados y carreras celebradas en la villa, un encuentro que este año se ha pospuesto hasta la noche del pasado viernes, pues se quiso incluir la celebración del encierro extraordinario de octubre. El presidente de la entidad organizadora, Francisco Salamanca, señaló que se trataba de la 17ª edición de este foro, en el que se suelen extraer conclusiones y posibles mejoras o cuestiones que poco a poco se han ido incorporando al encierro, que va evolucionando «como seguramente lo ha hecho a lo largo de los siglos», apuntando que la idea con la que surgió este debate es la de la mejora de los encierros.
Junto a él, en la mesa de debate, estuvieron Carlos Fraile, alcalde de Cuéllar y principal responsable de la organización; Diego de Diego, secretario de la peña taurina El Encierro; y Jesús Salamanca, presidente de la Asociación Encierros de Cuéllar. No hubo representación de las asociaciones de caballistas, cuyos responsables no pudieron asistir, aunque sí había jinetes entre el público asistente.
Durante el foro fueron muchas las cuestiones que se trataron y se anunciaron, como que se han emitido tres propuestas de sanción para personas que iban a pie, más por su conducta irrespetuosa a agentes de la autoridad que por interrumpir el correcto desarrollo del encierro, tal y como anunció el alcalde, Carlos Fraile. Uno de los artículos de la ordenanza de los encierros de Cuéllar señala la prohibición de acompañar a la manada durante el recorrido campestre «a todas las personas, a pie o a caballo, que no estén autorizadas».
El foro comenzó con un análisis respecto a la presentación del ganado, siendo unánime la opinión de que los astados contaron con trapío y una buena presentación, aunque acusaron una pérdida de kilos en las fincas donde permanecieron para su encabestramiento, una cuestión que se abordará con los responsables, según apuntó Fraile.
Sobre las ganaderías, también se puso sobre la mesa la conveniencia de que los encierros de la villa cuenten o no con determinados encastes o ganaderías, teniendo en cuenta que este año, en varias ocasiones, no se han podido parar los toros en el campo, lo que repercute en las calles, donde los toros llegan sin fuerza, e incluso andando en ocasiones, así como la necesidad de hacer un buen trabajo de encabestramiento.
Otra de las cuestiones a debate fue la organización del ciclo, lo que a juicio de Jesús Salamanca, cada año es más complicado porque cada vez hay más gente. También tachó de «barbaridad» el acompañamiento de 400 ó 500 caballos a la manada, «cuando realmente son 50 ó 60 los que trabajan». Para De Diego, en el campo ha habido descontrol, ya que manifestó no entender por qué no se pararon los toros o por qué se les soltaba antes desde el descansadero «sabiendo que no se van a poder parar».
Por su parte, Fraile se mostró satisfecho «de cómo hemos colocado las piezas» a pesar de las dificultades, en lo que a la organización se refería, apuntando que los caballistas, entre los que se encontraba todos los días durante el encierro, siempre se pensó que se podrían parar los toros en lo alto del Embudo.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión