Las ecografías, el caballo de batalla en Radiodiagnóstico pese a ganar agilidad
La unidad segoviana ha reducido a la mitad las tardanzas, pasando de 33 a 16 días este año, lo que ha permitido disminuir las pruebas pendientes
Los conciertos con la sanidad privada es una de las palancas accionadas por Sacyl para acortar las demoras y reducir las cifras de pacientes en ... espera. El servicio de Radiodiagnóstico del Hospital General de Segovia es de los que más requieren de esta colaboración, que cuenta con el beneplácito presupuestario de la Gerencia Regional. Ese apoyo externo ha ayudado a aligerar desde hace un tiempo la bolsa de pruebas pendientes y para acelerar los ritmos de trabajo en la cadena del sistema asistencial, no solo por el mayor volumen de técnicas realizadas, sino sobre todo por dotar de mayor fluidez a su lectura e interpretación, lo que facilita su vez un mayor dinamismo en los diagnósticos requeridos por las distintas especialidades.
Sin embargo, las estadísticas que ha hecho públicas Sacyl a través del portal 'on-line' Salud Castilla y León son el reflejo del caballo de batalla que arrastra la unidad de Radiodiagnóstico, que no es otro que el de las ecografías. Es la técnica más atascada, a pesar de la mejoría que ha experimentado en los últimos meses, tanto en lo que respecta al retraso medio acumulado por los pacientes que aguardan someterse a la prueba como en la propia lista de espera de diagnósticos pendientes.
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El tercer trimestre del ejercicio actual echó el cierre con 108 ecografías en cartera, doce veces más que las mamografías demoradas a fecha del 30 de septiembre. Los avances conseguidos tanto por medio de la externalización de las lecturas de pruebas mediante un concierto con un centro privado de Segovia como a través de las peonadas de los profesionales, han servido para aliviar las tardanzas. Y en buena medida, como acreditan las cifras del portal de Sacyl. Basta con echar la vista al inicio de este año, cuando las ecografías en la lista estructural sumaban 237, lo que significa que en nueve meses se ha reducido más de la mitad. También se han recortado los tiempos para hacer ecografías a la mitad –de 33 a 16 días de media–.
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