Cuevas de Provanco: «Una asociación que se mueve»

Cuevas de Provanco como muchos otros pueblos sufre el problema de la despoblación. Es cierto que aquí no se va nadie, ya no hay emigración, pero el censo cae porque la gente fallece. Nosotros tenemos la suerte de contar con un grupo joven, más o menos numeroso, de personas de 35 a 55 años y con la Asociación Cultural de Cuevas de Provanco, que da mucha actividad al municipio.

La asociación ha sabido atraer gente con sus iniciativas, como la matanza y comida popular en Semana Santa, una fecha en la que nuestra población de 130 empadronados se triplica. También la asociación ha sabido recuperar elementos arquitectónicos del pueblo como las fuentes y los lavaderos, reformados hace ya unos años y que forman parte de nuestro patrimonio. Como también lo hace, la iglesia, que vienen personas a verla y que un particular la enseña.

A pesar del empuje de la asociación, el pueblo sufre el olvido y los recortes. Así, el transporte público a Segovia, que está a un centenar de kilómetros, ha cambiado de ser toda la semana a solo pasar dos días y el tramo de cinco kilómetros de la carretera a Sacramenia está penoso. Pero Cuevas se mueve y merece una visita.