Cuéllar autoriza a 220 caballistas para participar en sus encierros de este año
La cifra supone un incremento sobre lo anunciado inicialmente, pero se ha querido incluirles al haber tramitado la documentación en plazo
El Ayuntamiento de Cuéllar ha autorizado a un total de 220 caballistas para participar en los encierros de la localidad, que este año se desarrollarán del 31 de agosto al 4 de septiembre, dentro de sus fiestas en honor a Nuestra Señora la Virgen del Rosario. La cifra final supone un leve incremento de 20 caballistas sobre lo anunciado anteriormente, pues el Consistorio señaló que únicamente se admitiría a 200 jinetes.
Sin embargo, finalmente se ha admitido la inscripción de los 220 jinetes que cursaron la autorización estando abierto el plazo. «No se ha querido dejarles fuera, ya que habían tramitado toda la documentación pertinente», aseguró el alcalde, Carlos Fraile, que instó a todos ellos a que cumplan con todas las normativas.
El regidor se refiere a instrucciones como que los chalecos, que se entregarán este fin de semana a los jinetes autorizados para participar en los encierros, son personales e intransferibles y, por tanto, solo los podrá portar el titular de la autorización. Para ello, el Ayuntamiento establecerá distintos puntos de identificación personal de los caballistas, que serán realizados por parte de la Policía Local y la Guardia Civil.
Otra cuestión que se recuerda de manera especial es la ubicación de los jinetes en la zona del descansadero, una vez cruzada la autovía y previa a Los Encaños. En este lugar solo deberán permanecer el número de caballistas que determinen la dirección de campo y la organización, mientras que el grueso de jinetes tendrán que continuar hasta una zona que estará señalizada con banderas durante los encierros. El Ayuntamiento hará especial énfasis en esta zona durante este ciclo de encierros con el objetivo de que las reses no inicien la carrera hasta las calles de la villa desde el paso de la autovía y así puedan llegar con fuerza al recorrido urbano.
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Esta también es una de las indicaciones que aparece en la declaración jurada que los caballistas han firmado como parte de su solicitud de participación en los encierros, donde se marcan las normas que deben ser aceptadas y cumplidas para inscribirse y se parte del ciclo de este año. Se especifica también que aquellos jinetes que no estén identificados correctamente durante todo el recorrido serán expulsados del mismo y podrán ser sancionados; y que los directores de campo serán los encargados de marcar las instrucciones para conducir la manada, que se debe acompañar de manera ordenada, en la zona delantera o los laterales, y en ningún caso se podrá permanecer detrás de la misma, y menos aún galopando.
Además, no estará permitido espantar, citar a las reses para sacarlas del recorrido o maltratar al ganado; grabar el encierro desde el teléfono móvil; acudir al encierro 'disfrazado'; la realización de picadero o calentamiento durante el transcurso del encierro; acudir al traslado bajo los efectos del alcohol o sustancias estupefacientes, así como fumar en todo el recorrido; molestar, empujar u obstaculizar a otros participantes, o que un caballo porte a más de una persona.