El Club Ciclista San Miguel pone en marcha una campaña de captación de socios

Una tradición que estuvo a punto de desaparecer. Un bache del que supieron sobreponerse y, tras una pandemia y dos años sin celebrarse la prueba ciclista, el club acaba de comenzar una nueva etapa en la que ya se encuentran inmersos en la preparación de la que será la sexagésimo segunda edición de esta consolidada cita, a la que desde hace unos años se ha sumado una cronoescalada con final en el Castillo que poco a poco está arraigando entre los aficionados.

Así, todos los miembros de la junta directiva del club han iniciado ya la preparación de las pruebas y para ello han puesto en marcha una campaña paralela de captación de socios, en la que recuerdan que la carrera y la tradición de comer las chuletas en el pinar están ligadas estrechamente a los vecinos, «a quienes pertenece verdaderamente esta costumbre» y por ello piden su apoyo en estos momentos. Se inicia así una campaña para atraer socios de la localidad con el objetivo de poder continuar con la tradición. Y es que, a pesar de que el club ha conseguido renovar su directiva, queda aún la parte más dura, la de conseguir financiación para el desarrollo de las pruebas deportivas. Para ello, recuerdan que sin la celebración de la clásica de La Chuleta no se conceden los permisos excepcionales que permiten a los vecinos hacer hogueras controladas en los pinares al paso de la carrera. Es decir, que «sin esta prueba, la tradición sigue en peligro».

Es por eso que se han establecido las cuotas de pago para los nuevos socios, cuyo importe puede suponer un gran impulso para el club. De este modo, los adultos pagarán diez euros, mientras que se ha establecido también una cuota para niños, quienes pagarán cinco euros por su pertenencia. Con esta nueva cuota se pretende que la tradición siga viva y los más pequeños sean también miembros y partícipes del club y de sus iniciativas.

Para realizar el pago de la manera más cómoda para los vecinos se han dispuesto tres vías, con el objetivo de facilitar todo lo posible a los socios, así como a los que se incorporen como nuevos miembros, el hacer efectiva una cuota «que es de vital importancia en este nuevo camino que inicia el club», apuntan desde la nueva directiva, quienes aclaran también que formar parte del mismo no implica la participación directa y presencial en las actividades, sino que «simplemente se trata de un apoyo y una implicación que el propio socio podrá transformar en voluntariado cuando así se requiera y si así lo desea».

Por último, el Club Ciclista San Miguel agradece la confianza depositada en la entidad ante una edición tan deseada de 'Las chuletas', tras dos años sin poder celebrarse. Muestran la esperanza en que pueda desarrollarse con gran entusiasmo y dedicación gracias a la aportación de los vecinos.