El Ayuntamiento de Cuéllar adquirirá material para equipar el albergue

El Ayuntamiento de Cuéllar aprobó, en la última sesión del Pleno, una modificación presupuestaria en la que se incluían dos partidas destinadas al equipamiento del albergue municipal, en concreto una de 2.350 euros para la adquisición de diversos electrodomésticos, como lavadoras; y otra de 800 euros para la compra de equipos para procesos de información.

El pasado 1 de febrero de 2020 finalizó el contrato de gestión privada de las instalaciones, tras lo cual el Ayuntamiento decidió la remunicipalización del albergue. Desde entonces se trabajó en la mejora de las instalaciones, como trabajos de pintura, arreglos y mantenimiento.

También se dio de baja como albergue juvenil y se tramitó el alta como albergue turístico, además de aprobar las tasas que rigen las instalaciones. Asimismo se abrió una selección para la contratación de una persona encargada de la gestión de reservas, recepción y atención de los huéspedes, limpieza de las instalaciones y cocina.

Aunque se trabajó durante varios meses en el proyecto, la llegada de la pandemia del coronavirus hizo imposible la apertura con la gestión municipal, pero las instalaciones se dejaron preparadas e incluso se llegaron a poner al servicio de Sanidad en el caso de que el virus se extendiera y fuera necesario ubicar allí a personal sanitario o enfermos.

Entre unas cuestiones y otras, la apertura del albergue con la gestión municipal no se ha llevado a cabo aún, si bien la adquisición de los nuevos equipos hace pensar que la apertura puede estar cerca.

Es por ello que la portavoz del Partido Popular, Nuria Fernández, preguntó al equipo de gobierno sobre si está prevista su apertura próximamente y sobre si se ha elaborado un plan de comercialización sobre las instalaciones.

La concejala de Servicios Públicos Municipales, Lucía Arranz, detalló que las instalaciones pasaron la inspección correspondiente hace meses, por lo que se encuentra todo listo para su posible apertura, aunque se están ultimando pequeños trabajos en el interior.

A pesar de ello las condiciones de apertura actuales, que refieren que no se puede ocupar más de un tercio del aforo y que no pueden compartir habitación aquellas personas que no son convivientes, han hecho que el equipo de gobierno no tenga una fecha prevista de apertura, aunque están pendientes de que pueda llegar próximamente una ampliación de los aforos. Esta reducción de aforo ha supuesto que la mayoría de albergues se encuentren cerrados.

Arranz apuntó al verano como una posibilidad de apertura, aunque todo ello condicionado a una mejora de la situación sanitaria, por lo que en estos momentos «no se puede poner fecha». También señaló que no se ha fijado ningún plan de dinamización, teniendo en cuenta que no se tiene certeza sobre su apertura.

Explicó que dicha apertura dependerá de la situación sanitaria y del aforo que se permita cuando se pueda abrir. Especificó que se cuenta con ideas, por lo que las ganas de la apertura son máximas, y más teniendo en cuenta que se ha interesado gente por poder albergarse en las instalaciones, pero «no merece la pena tenerlo abierto, porque se daría cabida a cuatro o cinco personas el fin de semana, como mucho», manifestó.

Fernández señaló que es independiente el aforo de la posibilidad de realizar un plan de comercialización, así como que no se trata de crear un plan de dinamización, por lo que pidió al equipo de gobierno que trabaje sobre ello y que esté listo antes de que decidan realizar la apertura, antes de que «las fechas se nos echen encima» y luego no se pueda aprovechar el tirón inicial que puede suponer el fin del estado de alarma y las ganas de viajar de muchos.