Los ascensores de los Rosales siguen a la espera de que Fenosa cambie el cableado

La comunidad de propietarios Los Rosales, la primera en Cuéllar en instalar ascensores en suelo público, se encuentra en un momento delicado, ya que no consigue concluir la obra de mejora de la accesibilidad ante la falta de respuesta por parte de la empresa distribuidora de energía, que desde hace varios meses tiene que realizar un cambio de cableado. Es Unión Fenosa la empresa encargada de cambiar el cableado que antes transcurría por la fachada y que en estos momentos cuelga por distintos puntos de las escaleras y portales, sin que desde la distribuidora se les dé ninguna solución. Así lo señala el presidente de la comunidad de vecinos, José Francisco García, que apunta que en estos momentos la obra se encuentra prácticamente parada, puesto que existen multitud de cuestiones que no se pueden realizar al tener el trenzado de cables sin situar. García explica que el trenzado venía por la fachada, pero ahora, al haber realizado un saliente por la misma, que se corresponde con la estructura en la que se albergan los ascensores, los primeros exteriores que se instalan en Cuéllar, hay que cambiar dicho cableado, tal y como marca el proyecto.

Aunque el expediente en lo que respecta a la energía eléctrica se inició en agosto de 2019, fue en julio de 2020 cuando una empresa cuellarana se hizo cargo de la obra, lo que se notificó oportunamente a Unión Fenosa, empresa que por el momento no ha dado una respuesta ni a los propietarios ni a la empresa que se encarga de los trabajos de electricidad, a pesar de las múltiples llamadas que se han realizado en los últimos meses de forma semanal. Uno de los principales problemas a los que se enfrenta la comunidad, es que la obra de mejora de la accesibilidad de las viviendas, fue beneficiaria de una subvención de 229.324,50 euros para unas obras que incluyen la instalación de cuatro ascensores, uno en cada uno de los bloques de los que se compone el conglomerado de viviendas, y el arreglo de la cubierta.

El plazo para concluir la obra finalizaba este mismo mes de marzo, puesto que contaban con un plazo de 24 meses para su ejecución. Sin embargo, al ver la falta de respuesta de la distribuidora, se decidió solicitar una prórroga, que ha sido concedida, por lo que la comunidad ha conseguido retrasar el fin de obra 99 días más. Son menos de cuatro meses lo que tienen para finalizar una obra que no termina ahí, puesto que después «hay que presentar papeleos, firmar fines de obra…», señala el presidente de la comunidad.

García detalla que no es sólo incluir el nuevo cableado, sino que en estos momentos «tenemos parados los cuatro ascensores», que no pueden recibir energía al no cambiar el cableado. Tampoco se pueden terminar las obras de la fachada, puesto que por ella deberán cruzar los cables, pero tampoco pueden concluir los paneles eléctricos, las paredes por las que transcurren los cables en el interior de los portales y las escaleras «que posteriormente hay que lijar, pintar y poner el rodapié»; y tampoco pueden finalizar las escaleras, puesto que en el último peldaño se encuentra una de las conexiones del cableado. «Tenemos parada la obra», asegura.

La obra de cambio del cableado que tiene que ejecutar Unión Fenosa se puede realizar desde hace varios meses. En concreto en dos de los ascensores, los que iban más avanzados, se dejó todo preparado para la realización en el mes de septiembre. Entienden que no se hiciera entonces y que la empresa quisiera realizar la obra en los cuatro portales al mismo tiempo, lo que se puede realizar desde hace cuatro meses.

Desde entonces no han parado las llamadas y reclamaciones y en las últimas semanas la única solución que se les ofrece es que abran una incidencia, lo que ya se ha hecho, aunque sin respuesta. El presidente consiguió hace unos días mantener una conversación con un contacto de la empresa, que, según García, le dio muy buenas palabras, pero desde entonces tampoco han tenido noticias. Ha intentado contactar nuevamente con él, sin que en el número fijo que le ofrecieron le hayan cogido el teléfono. Durante la mañana de ayer llamó hasta en cinco ocasiones «y no contesta nadie».

Tras poner reclamaciones e incidencias y ante la falta de respuesta de la empresa y la posibilidad de no conseguir finalizar la obra a tiempo y, por tanto, perder la subvención, se estudiará si reclamar el importe de la misma a la entidad, lo que estudiará el abogado de la comunidad si se diera el caso. El enfado aún es mayor teniendo en cuenta que la comunidad de propietarios ya pagó por la ejecución de las obras a Unión Fenosa, un total de 8.000 euros. «Cuando has pagado, hacen lo que les da la gana», afirma García.

La comunidad de propietarios Los Rosales, formada por 64 viviendas divididas en dos edificios de cuatro alturas y cuatro portales, lleva varios años esperando estas obras de mejora de la accesibilidad, teniendo en cuenta que la instalación de ascensores por la fachada exterior de los edificios se realiza por primera vez en la villa, por lo que hubo que realizar una modificación puntual en las normas urbanísticas municipales y crear una nueva ordenanza para la utilización privativa o aprovechamiento especial del dominio público local con ascensores adosados a fachadas de edificios ya construidos.

Tras esos pasos se firmó un decreto para conceder la ocupación y concesión del suelo de dominio público como bien demanial de uso público y finalmente la comunidad de vecinos firmó un convenio con el Ayuntamiento para la concesión y ocupación del suelo necesario en el callejón de Los Rosales para la utilización del suelo, con una concesión de 75 años y únicamente para el uso de la implantación de los ascensores.