El arranque «muy inmejorable» del Nava y su látigo de realidad
El técnico navero no ve dinámicas en «solo tres partidos» y recibe con prudencia hoy al Puente Genil desde el cuarto puesto
El Viveros Herol Nava suma cuatro puntos de seis, un comienzo que su técnico, Álvaro Senovilla, califica como «muy inmejorable»: dos triunfos y una derrota ... por uno en Pamplona en un duelo que pudieron empatar en la última acción. Una dinámica que invita a la felicidad, incluso a comprensibles delirios de grandeza para un equipo que reafirma su candidatura a puestos europeos, un hito del que el curso pasado solo le separó un gol. Pero el técnico cierra el grifo del futuro y prohíbe ir más allá de los 180 minutos de balonmano que otean en el retrovisor. Subraya que «el deporte no tiene memoria histórica» y bloquea, como el mejor de los porteros, cualquier pregunta que no considere empírica. Con ese látigo de realidad recibe su equipo hoy (18:30 horas) al Puente Genil.
La primera victoria fuera de casa del Nava llegó dos meses antes que la pasada temporada –no fue hasta la penúltima visita de la primera vuelta, en Benidorm– y en el Palacio de los Deportes de Logroño, la pista más ilustre en la que ha ganado, la de un rival que ocupó puestos europeos, aunque rechazara la invitación. «Nos da mucha motivación, es una forma de reivindicar nuestro trabajo y nuestra forma de juego. Que la aportación de todos es muy importante. Igual que un día brillaban unos, el otro día brillaron otros. Esa fuerza nos va a hacer aguantar los momentos malos en una liga tan larga». Dos puntos que dan por superado un hándicap con el que arrancó la temporada: la falta de ritmo en una preparación marcada por la grave lesión del meta Dzmitry Patotski.
Tras repartir los minutos en la portería entre Luis de Vega y Yeray Lamariano en la derrota en Pamplona, el primero jugó íntegros los dos siguientes partidos y fue una pieza clave en las victorias. Con todo, su técnico no otorga el puesto en patrimonio. «No hablamos de titulares y suplentes, tenemos muchos parámetros en cuenta para aprovechar el potencial de nuestros jugadores al máximo. Puede ser que el próximo partido juegue Yeray 60 minutos». El técnico no considera suficiente un solo partido en casa –el disputado ante Valladolid– para analizar cambios significativos respecto al año pasado, un compendio de malas primeras partes y grandes remontadas. «Acaba de empezar la liga, aquí llevamos tres partidos. En el deporte ha llegado un momento en que la gente no tiene ninguna constancia del tiempo».
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Será el reencuentro de Luisfe con sus excompañeros y el lugar en el que nació. Un arma más para preparar el partido. El cuadro cordobés llega en duodécima posición tras lograr ante Cangas su primera victoria de la temporada en un final ajustado (35-34). Ocurrió después de perder sus dos partidos iniciales ante Torrelavega y Ademar.
Pese al buen inicio, en una liga tan pareja todo puede torcerse en un suspiro. Y las dos siguientes visitas a Nava son del Barça y el Bidasoa. Así que el consejo médico evitar ahorrar. Algo que el técnico también rechazó juzgar. «Entrar a valorar diferentes cosas cuando todavía no se conocen es jugar a ser futurólogo. Y yo soy entrenador». El técnico no juega, pero su porcentaje de paradas es más que respetable.
El horario favorito de los segovianos y un rival veterano en el que todos tienen gol
El mensaje del Nava es que tras ganar en una cancha ilustre, Puente Genil no es un rival menor. «Es un equipo que te pone en muchas dificultades. Tiene jugadores muy peligrosos en ataque; todos sus primeras líneas son capaces de meter gol por sí mismos; eso es muy difícil en balonmano», subraya su técnico, Álvaro Senovilla, que puso en valor su veteranía para «aprovechar ventajas si te ven dormido en los laureles». Y recordó como los cordobeses se lo hicieron pasar «muy mal» a los suyos el curso pasado en Nava de la Asunción –uno de los duelos que los segovianos tuvieron que remontar para acabar ganando en los últimos segundos por la mínima– con un trabajo de desgaste físico durante los 60 minutos.
La aspiración del Nava es dominar a través de la defensa, uno de los pilares clave del triunfo en Logroño, desde los gemelos Guardiola a Bonanno o Nevado. Una receta que Senovilla aspira a combinar con los balances entre ataque y defensa ante un rival que peleó hasta el final en Torrelavega, líder y único equipo con seis puntos –Ademar y Barça suman cuatro con un partido menos–, con esa apuesta rocosa. Y con la grada. «Es muy importante que la afición esté a su altura. Nosotros tendremos que esforzarnos para llegar a ella, siempre están un punto por encima. Uno de los objetivos principales es verles felices al final del partido». Es el segundo compromiso como local del Nava y la segunda vez que la Asobal acepta su horario preferido. Un aliado en busca de los puntos.
El Nava tendrá que imponer su versatilidad en ataque ante una portería que repite los nombres de la pasada temporada y que también cayó derrotada en su pista en abril. «Cada uno tiene su estilo y a Puente Genil no le ha ido mal nunca. Lleva un montón de temporadas en Asobal».
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