Elena García Gil prepara su salida del patronato de la Fundación Caja Segovia
Los recientes autos de la Audiencia piden su encausamiento en los casos de las prejubilaciones millonarias y del Torreón
Mónica rico
Lunes, 22 de mayo 2017, 10:33
Aunque la pregunta estaba en el aire, nadie la respondía porque quizás faltaba información, el dato clave que diluyera en certidumbre la duda o la afianzara y apuntalara definitivamente para poder formularla. ¿Por qué continúa Elena García Gil como integrante del patronato de la Fundación Caja Segovia? ¿Por qué sigue en la entidad heredera de la Obra Social y Cultural cuando su nombre figura como una de las personas investigadas en las tramas de las prejubilaciones millonarias y del préstamo del Torreón del Lozoya? Una operación crediticia que, por cierto, lastra sobremanera a la institución a la que representa y en la que ocupa una de las sillas del organigrama gestor.
Si la Audiencia Provincial, en ambos frentes judiciales, pide la apertura de juicio oral para Elena García Gil, al igual que lo solicita para otros antiguos cargos directivos de la extinta entidad de ahorros, ¿por qué mantiene su puesto en la Fundación Caja Segovia, que ejerce de acusación particular en los dos procesos? ¿Cómo puede ser que esté a los dos lados del cauce jurídico, que por una parte se siente junto al resto de compañeros patronos de una entidad que es acusación porque se siente víctima y damnificada, y que al mismo tiempo sea ella la investigada y para la que se pide sentarse en el banquillo como encausada?
Fuentes consultadas por El Norte de Castilla matizan que García Gil no participa en la adopción de acuerdos y decisiones que la Fundación Caja Segovia realiza con respecto a los dos procesos judiciales que hay abiertos en los juzgados número 3 y 5 de la capital.
Durante los últimos meses, el patronato ha esperado algún gesto o movimiento en forma de renuncia o dimisión de la que fuera secretaria del comité de Retribuciones en la época en que se aprobaron aquellas prejubilaciones y quien también se sentó en el consejo de administración que dio luz verde a la operación que hipotecó el Torreón. Los autos de la Audiencia han sido un acicate a esa espera. En especial, cuando la representación legal de Elena García Gil en el proceso de las prejubilaciones interpuso un recurso en el que intentaba deslegitimizar a la acusación particular que ejerce la Fundación Caja Segovia.
La decisión está tomada
Ese punto de inflexión parecía hacer inviable la continuidad de la exdirectiva en el organigrama que rige los designios de la institución. Han pasado más de tres meses desde entonces, y una nueva notificación de la Sala Provincial, en este caso sobre el caso de la hipoteca del Torreón, situaba a Elena García Gil como una de los doce integrantes del consejo de administración que aprobó el préstamo por valor de cerca de 7 millones de euros que usó como aval el buque insignia del patrimonio de la difunta Obra Social y Cultura, además de otros edificios.
Las peticiones de dimisión de la investigada se han sucedido desde la orilla política. Tanto Izquierda Unida como la asociación cultural UPyD-Centrados en Segovia han solicitado la salida de García Gil de la Fundación Caja Segovia por la incoherencia que se presentaba y el choque de intereses entre los de la entidad presidida por Javier Reguera. La institución se siente víctima de supuestos delitos de administración desleal y de apropiación indebida, y en ambos procedimientos figura el nombre de García Gil, al igual que el de Atilano Soto y Manuel Agudíez, presidente y vicepresidente de la Caja, respectivamente.
Por escrito
Son los tres antiguos altos cargos que coinciden en las peticiones de la Audiencia Provincial de no dar carpetazo a los asuntos y de instar a dar continuidad a las investigaciones y al juicio oral.
La decisión de dimitir del patronato de la Fundación Caja Segovia la tiene tomada, ha confesado recientemente Elena García Gil. Ahora queda solo dar forma a esa renuncia y transmitirla a sus compañeros en el órgano de decisión, que se reunirá el 19 de junio para tratar las cuentas de la institución. Según ha deslizado, está preparando la carta de su baja de la entidad.