Decenas de segovianos visitan Baterías en el Día de las Fuerzas Armadas
La Academia de Artillería y la Guardia Civil presentan en el acuartelamiento las exposiciones del material reglamentario que utilizan en sus servicios
Miguel Ángel López
Sábado, 28 de mayo 2016, 19:28
En el acuartelamiento de Baterías había dos docenas de personas esperando a que el soldado que hacía guardia en la puerta les indicara que podían pasar. Faltaban unos minutos para que pudieran ver lo que había preparado dentro para celebrar la jornada de las Fuerzas Armadas. Curiosidad y cercanía movían a muchos, de todas las edades, de los que entraron al recinto militar este sábado. Con trajes de campaña, soldados, suboficiales y oficiales recibieron al público que fue creciendo en número a lo largo de la mañana, con el coronel director de la Academia de Artillería, Javier Alonso, al frente del dispositivo para que todo fuera del agrado de quienes acudieron.
Exposiciones estáticas y dinámicas, como habían anunciado, estaban preparadas en la explanada del campo de fútbol del acuartelamiento para exhibir el material de Artillería cuyas características explicaban alumnos de las escalas de e enseñanza militar de oficiales y suboficiales de la Academia; lo mismo hacían para deleite de los más pequeños los agentes de la Guardia Civil situados en los mostradores dispuestos para mostrar el material que utilizan los distintos servicios del cuerpo en la provincia, los coches de las patrullas de Seguridad Ciudadana y de Tráfico y las motocicletas de este destacamento y del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona), a los que subieron niños y mayores para hacerse fotografías y hacer sonar las sirenas.
Este Día de las Fuerzas Armadas, de sol entre nubes y temperatura suave, la gente que acudió a Baterías pudo ver los recursos reglamentarios que utilizan las distintas unidades del Ejército y de la Guardia Civil, y los pequeños colmaron la expectación que tenían al ponerse los chalecos balísticos y los cascos de campaña, al mirar por los prismáticos de largo alcance y tocar con las manos las armas y protecciones de todo tipo, pistolas del calibre 9 milímetros parabellum, fusiles como el LC56, el subfusil AZ70B, escopetas, los antiguos Cetme que ahora se utilizan para lanzar pelotas de goma o botes de humo, escudos, la peculiaridad de la ración individual de combate, que incluye, por ejemplo, el polvo isotónico desfatigante «y si se toman eso no se cansan», preguntaba un pequeño a su padre al salir de la tienda de campaña o de ver sus propias huellas dactilares, las de toda la mano, tomadas por el equipo de huellas de la Benemérita o en enorme cañón que fue desplegado en mitad del campo de deporte.
El comandante Jesús González Laa, también con el uniforme de campaña, comentó que lo más llamativo para el público sería el despliegue de una unidad de artillería antiaérea y de los misiles Mistral. Y así fue, porque hubo caras de asombro y exclamaciones cuando aparecieron en el campo los camiones que trasladaban los equipos de dirección de tiro Skyward, los cañones antiaéreos 35-90, 155-52 o el 105-14, en una exhibición que terminó con una atronadora salva y los aplausos del público.
Después, la Guardia Civil mostró con todos sus elementos cómo funciona un control para identificar y controlar supuestos delincuentes. Las unidades simularon que un coche que intentaban parar ocupado por supuestos delincuentes trataba de huir, sin lograrlo, claro, y una vez detenido el vehículo, intervino la unidad cinológica para detectar la posible existencia de droga.
De nuevo los aplausos cerraron la demostración en esta jornada de acercamiento de las Fuerzas Armadas a la población, de la que en Segovia siempre están cerca.