El BOE hace oficial el traslado a la Audiencia del juez de las prejubilaciones de la Caja

El Boletín Oficial del Estado (BOE) publicó este viernes la marcha de la magistrada de la Audiencia Provincial de Segovia María Felisa Herrero Pinilla a la Audiencia de Madrid y la de la magistrada del Juzgado de Menores, Laura Tamames Prieto-Castro, a la Sala de lo Contencioso-Administrativa del Tribunal Superior de Justicia de Madrid. También el traslado a la Audiencia Provincial del magistrado-juez del Juzgado de lo Mercantil y de Primera Instancia e Instrucción número 2. Una noticia, esta última, que ha venido a confirmar oficialmente el visto bueno dado por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) a la voluntad del propio Marina Reig, que tomó la decisión de pedir el cambio tras meditarlo largamente.

Ahora, el CGPJ tiene que nombrarle un sustituto para el Juzgado de lo Mercantil y de Primera Instancia número 2. Una elección importante, ya que ese juzgado es el que investiga el caso de las prejubilaciones millonarias de Caja Segovia. Casi cuatro años después de la denuncia que interpuso, en otoño de 2011 la representación jurídica de UPyD, la instrucción prosigue, aunque fuentes cercanas al caso de las prejubilaciones e indemnizaciones precisan que las diligencias se hallan muy avanzadas.

El ya extitular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 tendrá que poner al día a la persona seleccionada para ocupar su lugar. Esta, por su parte, se verá obligada a estudiar las diligencias, pruebas, investigaciones y conclusiones realizadas y extraídas hasta la fecha en que Marina ha oficializado su traslado. Entre toda esa ingente documentación están incluidos los testimonios de los imputados que han pasado por la sala de vistas para prestar declaración a lo largo de estos cuatro años.

Las partes implicadas en el proceso judicial reconocen que es una tramitación ardua, farragosa y sobre todo muy polémica, debido a la formidable sensibilidad popular generada en una ciudad pequeña como Segovia en torno al escándalo de las supuestas prejubilaciones millonarias que se repartieron altos cargos de la entidad de ahorro de toda la vida, entonces presidida por Atilano Soto, justo antes de hacer efectiva la integración en Bankia. Además del lógico parón que fuentes judiciales intuyen que va a sufrir la causa, Jesús Marina, ya como magistrado de la Audiencia, tendrá la obligación de inhibirse de cualquier decisión relacionada con la causa de Caja Segovia.