La población inmigrante empadronada en Salamanca desciende un 24% en cinco años

El 3,7 por cierto de la población de Salamanca es inmigrante. Un total de 12.336 personas extranjeras estaban empadronadas en 2018 en la capital y la provincia salmantinas. Lejos de aumentar la población inmigrante, en los últimos años la tendencia ha sido de bajada constante, reduciéndose algo más de un 24% en los últimos cinco años. Según los datos de la Secretaría General de la Consejería de Presidencia de la Junta de Castilla y León, en 2013 los empadronados en Salamanca alcanzaban los 16.271, casi el cinco por ciento de la población salmantina.

El descenso de la población inmigrante empadronada es la tónica general en todas las provincias de Castilla y León; en su conjunto en los últimos cinco años se ha pasado de 164.780 a 123.575 extranjeros, lo que supone un descenso del 25%. Sin embargo, si nos remontamos al inicio de la década, el incremento de la población inmigrante se ha multiplicado por cuatro. Así, en el año 2001, solamente había 26. 572 empadronados en la Comunidad. Una cifra que se fue incrementando constantemente. De esta forma, en 2002 ya había 42.640, mientras que en 2006 eran 106.159, en 2008, 154.802 y en 2010, 169.498. El año con mayor número de extranjeros empadronados en Castilla y León fue 2012, con un total de 173.509. A partir de ahí, la población inmigrante comenzó a descender; en 2013 cayó un cinco por ciento, en 2014 casi un once por ciento, en 2015 un ocho; en los dos años posteriores, las caídas fueron casi del cinco por ciento. La tendencia a la baja se paró en 2018, donde la población inmigrante se incrementó un uno por ciento, cerca de 1.300 más. La misma tendencia que en la región ha ocurrido en Salamanca, donde en ese año hubo 584 inmigrantes más, apenas un 0,2% de incremento.

Salamanca no es la provincia con más extranjeros empadronados, ocupa el quinto lugar de la región. Muy por encima se sitúan, en cuanto a número de inmigrantes, Burgos y Valladolid, con 24.917 y 23.559 empadronados en 2018, respectivamente. Sin embargo, en el porcentaje de población extranjera sobre el total, Segovia destaca por encima de todas, ya que más del 10,5 por ciento de la población es inmigrante, alcanzando las 16.140 personas.

Los extranjeros empadronados en la región suponen poco más del cinco por ciento de la población total, y el 2,6 por ciento del total de extranjeros empadronados a nivel nacional, que en 2018 ascienden a 4.734.691 (el 10 por ciento de la población). Sin tener en cuenta las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, las islas Baleares son las que tienen más población extranjera empadronada, un 17 por ciento; le sigue Cataluña, con un 15%, muy cerca se sitúan la Región de Murcia y la Comunidad Valencia, con un 13,69 y 13,44%, mientras que en Madrid es un 12,5 por ciento. Las comunidades con menos porcentaje de población extranjera empadronada son Extremadura y Galicia; en la primera no se alcanza el tres por ciento y en la segunda es el 3,4%.

Por lo que respecta a los países de origen, en la provincia salmantina destacan en número los marroquíes, rumanos y portugueses, con 1.653, 1.390 y 1.365, respectivamente, empadronados en 2018. Superan el medio millar los procedentes de Bulgaria, Colombia, China y Brasil, mientras que los de Honduras, Venezuela, Perú, Bolivia, Ecuador y Ucrania se sitúan en cifras que van entre los 200 y 400. Franceses e italianos hay 220 y 292; por su parte, de Argentina y Cuba hay 147 y 138 empadronados, respectivamente. El resto son de Paraguay, Polonia y Argelia, con menos de cien empadronados.

En el conjunto de Castilla y León, el 50 por ciento de los empadronados proceden de países europeos, la mayor parte de la UE, destacando en cifra los búlgaros y los rumanos, que superan los 20.000. Los marroquíes son los terceros, con más de 19.000. De América, destacan sobre todo los procedentes de la República Dominicana y Colombia, pero hay empadronados de casi todos los países, también de América del Norte. En cuanto a Asia, los chinos se stitúan en cabeza con 3785 empadronados, también hay paquistaníes y sirios.

El descenso se ha dado en todos, destacando sobre todo el de los portugueses, que se han reducido a la mitad; los búlgaros y rumanos son unos 10.000 menos; mientas que el número de marroquíes es el que ha registrado menor descenso. Los extranjeros procedentes de América Latina también han descendido mucho en los últimos años; Colombia, Ecuador, República Dominicana, Bolivia y Perú, entre otros, ha reducido sus cifras en más de la mitad. En el lado contrario, se encuentran los chinos, los venezolanos y los procedentes de honduras y Ucrania, que han incrementado ligeramente su presencia en la región.

En cuanto a los extranjeros con certificado de registro, tarjeta de residencia y autorización de residencia en Salamanca, había en 2018 un total de 17.899, la mayoría del Régimen de Libre Circulación de la UE (12.125) y el resto del Régimen General (5.774). De ellos, 9.134 eran hombres y 8.765 mujeres. Por grupos de edad, la mayoría se situaban entre los 16 y 65 años, siendo menores 1.687 y mayores 899. La edad media era de 36,65 años. Los afiliados a la seguridad social ese año rondaban los 4.800.

La autorización de estancia con estudio, según la Junta, se dio a 1.345 extranjeros, 802 mujeres y 543 hombres. En la provincia salmantina 2.375 extranjeros cursaban estudios no universitarios.

Por lo que respecta a la Sanidad, en Salamanca 12.632 extranjeros tenían tarjeta sanitaria en 2018, el 3,89 por ciento de la población total del área de Salud, que era de 324.675.

Por otro lado, en cuanto a los nacimientos de madre extranjera y los matrimonios celebrados con al menos un cónyuge extranjero, los últimos datos en Salamanca apuntan a 182 nacimientos (la cifra más alta fue en 2009 con 377) y a 113 matrimonios; las defunciones fueron 24.