La Diócesis de Ciudad Rodrigo aporta material sanitario de protección a varias residencias

La Diócesis de Ciudad Rodrigo, a través de una nota de prensa, ha comunicado que desde esta institución se están llevando a cabo varias iniciativas que «a pesar de su sencillez, persiguen prestar apoyo a las personas en estos tiempos de pandemia».

Entre esas acciones se incluye la entrega de material de protección sanitario a varias residencias de ancianos. En el listado de la donación aparecen cubrecalzas, cubrecabezas, manguitos, mandiles impermeables y 2.000 mascarillas confeccionadas por las Madres Carmelitas. La fuentes diocesanas reconocen que «la realidad actual impide que el acceso a este tipo de material sea el deseado por todos».

Hay que recordar que esas mascarillas a las que se hace referencia forman parte del lote de más de 86.000 que se están canalizando a través de la empresa Textiles Acosta. Ellos disponían de la tela suficiente para esas mascarillas y son muchas las personas que colaboran en la confección, entre ellas, las propias monjas Carmelitas.

Por otra parte, desde la Diócesis se ha ofrecido al Ayuntamiento de Ciudad Rodrigo el edificio del Seminario San Cayetano para que sea utilizado en caso de necesidad. «Hasta el momento, las circunstancias locales no han derivado en el uso», inciden, «de igual modo, tanto el personal de esa casa como los propios sacerdotes están a disposición de las demandas que pudieran surgir en este tiempo».

Tanto las Conferencias de San Vicente de Paúl, como Manos Unidas y Cáritas, todas entidades vinculadas a la Iglesia civitatense, están en el programa que coordina el Ayuntamiento de Ciudad Rodrigo por el que los voluntarios hacen compras de primera necesidad destinada a personas vulnerables. En el caso de las Conferencias de San Vicente de Paúl, algunos de los voluntarios llevan la comida hecha a ancianos que ahora no cuentan con otras prestaciones.

Desde el mismo sábado 14 de marzo, día en el que se anunció el cierre de los templos, el rector del Seminario, Anselmo Matilla, emite la eucaristía diaria a través de Facebook; el obispo administrador apostólico, monseñor Jesús García Burillo, ofrece un vídeo diario dirigido a toda la Diócesis, algo que a nivel de parroquia también están haciendo muchos sacerdotes, recuerdan desde la diócesis civitatense.

Otros presbíteros están en contacto directo a través del teléfono con fieles que necesitan ser escuchados o, incluso, prestando un rato de atención diaria de forma presencial respetando las medidas de seguridad como es el caso de la parroquia de San Andrés.