Cáritas de Ciudad Rodrigo rebaja el número de familias pero no el de personas atendidas este año

«Los números son muy importantes porque son el reflejo de lo que está pasando, aunque a mí me gusta más ver rostros». Esas palabras las pronunció en una rueda de prensa ofrecida ayer la directora de Cáritas Diocesana de CiudadRodrigo, Maribel Yugueros, que aprovechó la campaña de Navidad de la entidad de la Iglesia para avanzar algunos datos del ejercicio 2018, aún sin cerrar.

Cáritas ha atendido a 357 familias en el servicio de Acogida, lo que supone más de 1.250 personas. «Ha descendido el número de familias, pero no hay menos atenciones porque algunas familias han pasado más veces», comenta. Todavía no se atreven a adelantar cifras económicas pero «creemos que hemos invertido más», aunque sí que tienen claros algunos porcentajes de lo distribuido hasta ahora.

La partida de vivienda se ha llevado el 41,65 por ciento de los fondos que distribuye la entidad, ante la dificultad de las familias para pagar la renta o hacer frente a recibos. El año pasado ese apartado fue del 56 por ciento.

Alimentación ha supuesto otro 15,41% y el capítulo de salud, un 6,10%. Cáritas sufraga también el transporte de personas que deben acudir al médico a Salamanca o a formarse para poder acceder a un trabajo, y esa partida se ha llevado el 4,54%. Sí que han bajado significativamente las ayudas para libros y material escolar, pasando del 18% al 3,75%, debido a que «el año pasado tuvimos solicitudes para el pago de matrículas universitarias y este año no, además el Ayuntamiento ha incrementado las becas».

Las ayudas para ropa se mantienen en el 1% y las becas para formación en el 25,49%. En concreto, se ha becado a las personas que trabajan en el taller de agricultura porque están en situación de vulnerabilidad y se entiende que esto supone una ayuda.

En este presentación tomó parte, igualmente, la delegada de Cáritas, María Ollanquindía, que recordó que esta campaña 'Feliz Navidad para todos' se llevará de forma directa a las parroquias de Ciudad Rodrigo: El Sagrario, San Cristóbal, El Salvador, Santa Marina y San Andrés, además de a los arciprestazgos, centros escolares y residencias que lo deseen.

María Ollaquindía puso de manifiesto algunos de los datos de una encuesta elaborada por la Fundación Foessa, apuntando que «la pobreza se hereda», por lo que describió un panorama «ciertamente desalentador para el futuro de nuestra sociedad y la cohesión de la misma, que necesita del esfuerzo de todos para evitar que las situaciones de pobreza y exclusión se hagan crónicas».

La delegada concluyó invitando a toda la sociedad a formar parte de este compromiso «aportando tiempo y generosidad, para mejorar la calidad de vida de quienes más lo necesitan, también aportación económica por pequeña que sea».