El Real Valladolid se resiste a dar el OK al Valencia para el traspaso de Marcos André

El Valencia ha ido estirando progresivamente su oferta al Real Valladolid para que el delantero brasileño se ponga a las órdenes de José Bordalás. De los tres millones iniciales ha llegado hasta los ocho actuales y el club che aún puede subir otro medio millón de euros en su oferta definitiva. La cantidad no llegará a los diez millones que el Real Valladolid fijó como frontera desde el principio, pero la diferencia ya no es tan insalvable como en los primeros tanteos. Además, hay otra serie de factores que se pulirán en el momento en que el Pucela acceda a la venta. En este capítulo se incluyen los denominados 'bonus individuales' de Marcos André que afectan al Real Valladolid. El club blanquivioleta percibiría más dinero si, por ejemplo, el delantero brasileño se erige en máximo goleador de la campaña con la camiseta del Valencia, entre otras variables. Esos 'bonus' no se limarán hasta que no exista el principio de acuerdo entre las dos entidades.

El Valencia considera que está haciendo un gran esfuerzo económico en la situación de mercado actual porque entiende que, con la crisis derivada de la pandemia, Marcos André no vale los diez millones solicitados de inicio por el Real Valladolid. Si la operación se cierra por ocho u ocho millones y medio, será una de las más importantes del verano entre clubes españoles. Directivos de otras entidades de Segunda División, ajenos a la negociación entre Real Valladolid y Valencia, consideran la oferta muy suculenta e invitan a fijarse en la corta de trayectoria de Marcos André con el Real Valladolid. El delantero brasileño disputó 23 partidos y anotó cuatro goles con el Pucela en Primera, aunque su rendimiento quedó condicionado por la pubalgia que sufrió a mitad de la pasada campaña y que interrumpió su progresión. Marcos André empezó a eclosionar con goles a partir de la jornada novena y marcó consecutivamente a Athletic Club, Granada y Levante, en el mejor momento del equipo blanquivioleta durante el curso, antes de precipitarse hacia la Segunda División. Para esta campaña en la categoría de plata, Marcos André apareció desde el principio como una de las piedras angulares del proyecto blanquivioleta, aunque el Valencia no tardó en aparecer para lanzar sus redes, aprovechando el descenso a Segunda del Pucela y la consiguiente reducción de la ficha del delantero en Zorrilla. Con el Valencia, Marcos André se garantizaría mantenerse en el escaparate de la Primera División y no sufrir los rigores salariales de la pérdida de categoría.

De momento, el traspaso sigue sin concretarse. «Hecho no está, pero todo parece indicar que saldrá», confirman las fuentes consultadas. El resumen es este:Marcos André quiere irse y el Real Valladolid –especialmente en su parcela deportiva– se resiste todo lo que puede ante la enorme dificultad de encontrar un recambio para uno de los futbolistas con más talento de su plantilla, dotado además de la magia del gol, el bien más preciado en el fútbol. Pero el Real Valladolid se ve obligado también a encontrar un equilibrio entre su parcela deportiva y el área económica.

Sin estar acuciado por una necesidad extrema, resulta una obviedad que el descenso a Segunda ha mermado de manera considerable su capacidad para retener a futbolistas con la proyección de Marcos André, especialmente si llega un club como el Valencia dispuesto a desembolsar 8,5 millones de euros para hacerse con sus servicios.

Ese dinero permitiría acometer situaciones internas derivadas de una plantilla saturada con nueve futbolistas sin ficha, a los que tiene que dar salida para acometer nuevas incorporaciones y equilibrar su balance. La situación es diferente a la que vivió, por ejemplo, el Espanyol la pasada campaña, cuando evitó desprenderse de Raúl de Tomás –su gran referencia goleadora– para buscar la vuelta a Primera. El club perico retuvo a su estrella, que marcó 23 dianas en la categoría de plata y se convirtió en una de las piezas fundamentales del ascenso blanquiazul.

A falta de poco más de una semana para que se cierre el mercado, el Real Valladolid no ha efectuado un solo fichaje, una situación que cambiará si se consuma el traspaso de Marcos André al Valencia. Aunque varias situaciones de mercado quedarán desbloqueadas, el problema pasará por encontrar un recambio con ciertas garantías para el delantero brasileño. El público de Zorrilla ya dejó claro el pasado viernes que no le interesa el dinero que deje Marcos André en las arcas sino que se mantenga una plantilla competitiva para volver a Primera División por la vía rápida. «¡No queremos pasta, queremos ascender!», gritaron los abonados del Pucela con el presidente Ronaldo Nazário presente en el palco.

Aunque todo parece encauzado para vender a Marcos André al Valencia, el Real Valladolid aún espera a las condiciones finales del club che para adoptar una decisión definitiva. La sensación es que el brasileño acabará traspasado, pero si no se produce este desenlace, en Zorrilla no dudan del compromiso que ofrecerá Marcos André en los dos años que aún le restan de contrato. De momento, el brasileño anda más pendiente de resolver su situación que de jugar al fútbol. Aunque aún sigue entrenándose con el Real Valladolid.