El estadio Zorrilla instalará un césped híbrido en junio tras el concierto de Alejandro Sanz
El club seguirá los pasos de Villarreal, Real Madrid, FC Barcelona, Athletic o Eibar, entre otros, para mejorar la estabilidad del suelo y limitar el riesgo de lesiones
No deja de generar controversia en los últimos tiempos el césped de Zorrilla que, si bien ha mejorado sustancialmente en las últimas semanas gracias a ... la fuerte inversión realizada por el club, sigue preocupando y figura en la lista de prioridades para la próxima temporada. De hecho ya existe un plan para sustituirlo a finales del próximo mes de junio en cuanto se celebre el concierto de Alejandro Sanz, señalado para el día 20.
Noticia Relacionada
El estadio Zorrilla acogerá el concierto de Alejandro Sanz el 20 de junio
El club se ha apuntado a la última moda en terrenos de juego y seguirá los pasos de clubes como el Villarreal, el Real Madrid, el FCBarcelona o el mismo Eibar, que hace apenas dos meses estrenó el nuevo sistema de césped híbrido aprovechando la visita del equipo culé. No es algo que se hayan inventado los grandes del fútbol español, ya que la mayoría de equipos de la Premier League ya vienen aprovechando sus beneficios en las últimas temporadas.
Los expertos no solo aseguran sin dudar un instante que reduce el riesgo de lesiones al mejorar la estabilidad del suelo sino que lo consideran fundamental en el drenaje. Por ello estadios en los que la lluvia es constante durante todo el año se plantean ahora dar el paso y utilizar el césped híbrido. «Los filamentos artificiales de la base conducen mejor el agua hacia abajo», apuntan un especialista en la materia como Gorka Unamuno, que trabaja para el Eibar.
Esta superficie está compuesta por un 96% de césped natural y un 4% del mismo plástico con el que se construyen las canchas sintéticas. Esta mezcla de césped natural y césped sintético se combina a través de un tejido que se encuentra debajo de la superficie y que, por lo tanto, requiere de un funcionamiento completamente diferente. No se siembra para después cortar. Se trata de tejer el material sintético con la hierba como si fuera un abrigo.
Este sistema ayuda también a un mejor drenaje en campos que reciben mucha lluvia
Llegado el momento, a finales de junio, unas máquinas procederán a enterrar aproximadamente 20 millones de fibras plásticas en el estadio Zorrilla. Máquinas que recorren el terreno de juego para soterrar fibras de plástico de 18 centímetros de largo.
Los orígenes de esta novedosa técnica se remontan a los años 90 cuando en la ciudad británica de Huddersfield requirieron un terreno de juego lo suficientemente fuerte como para resistir dos partidos de fútbol y rugby el mismo fin de semana.
Ya entonces se conoció como una tercera vía de los céspedes que se dio a conocer al mundo entero con motivo del Mundial de Sudáfrica primero, cuando dos de los estadios pusieron en práctica por primera vez esta tecnología híbrida, y en la Copa del Mundo de Brasil después.
A raíz de esa experiencia, y en cuanto corrió la voz de que proporcionaba mayor estabilidad y reducía el riesgo de lesiones, los grande estadios de fútbol del mundo se han ido apuntando.
El precio, otra ventaja
El precio es otro de los motivos que empujan a clubes menos adinerados a hacer el cambio. El césped natural que se necesita para cubrir un campo de fútbol profesional oscila entre los 85.000 y los 400.000 euros anuales, y en principio se puede cambiar entre tres o cuatro veces por temporada. A esta cifra hay que sumar el coste del mantenimiento, que se puede disparar a los 40.000 euros.
Un campo de césped artificial, en cambio, puede llegar a tener un coste final de 250.000 euros con un mantenimiento mucho más barato que puede alcanzar los 8.000 euros al año. En esta partida hay que tener en cuenta que no requiere ningún riego, lo que supone un ahorro importante.
En el caso del Real Valladolid la notable mejoría que ha experimentado el campo en las últimas semanas responde a las gestiones realizadas para traer unas mantas especiales desde Ucrania y unas máquinas de luz desde Holanda (lámparas de grandes dimensiones) que miman el césped cada noche.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión