«Los drones nos ayudan, pero seguimos juzgando las cosas sobre la hierba», dice Sergio González
El Valladolid graba sus entrenamientos tácticos desde el aire merced a un acuerdo pionero con la empresa Fly-Fut
La vista aérea siempre ha sido una herramienta muy interesante para los entrenadores, lo que ha hecho florecer grúas y plataformas en muchos campos de entrenamiento, pero esta temporada el Real Valladolid cuenta con un aliado mejor para ver los ejercicios con perspectiva: la grabación con drones. La entidad blanquivioleta ha llegado a un acuerdo con la empresa madrileña Fly-Fut, especializada en la grabación de fútbol con drones, para filmar las prácticas del primer equipo, el Valladolid Promesas (filial de Segunda B) y el conjunto juvenil A.
«Es una herramienta nueva», señaló este viernes Sergio González, técnico del Real Valladolid. «Los futbolistas crecen y el cuerpo técnico tiene que seguir creciendo con ellos. No podemos quedarnos atrás. Estamos abiertos a todo lo que sea mejorar prestaciones y corregir errores. Tenemos la aportación de los drones y grabamos todos los entrenamientos tácticos. Nos puede dar una visión distinta y más acertada, pero siempre sin perder la perspectiva más importante de lo que percibes en la hierba, donde realmente hay que juzgar las cosas», añadió Sergio.
El desembarco en Pucela es el primer contacto con el fútbol profesional de una Fly-Fut, una empresa concebida como una herramienta de entretenimiento, ya que sus servicios se basan en grabar partidos a equipos amateur y entregárselos no solo con la perspectiva que ofrece el dron, sino con una narración profesional.
La empresa pone sobre el campo a un piloto de drones –que debe contar con una certificación obligatoria y al que ofrecen una formación complementaria sobre grabación de fútbol– y cuenta con un equipo legal que gestiona con la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) la autorización del vuelo para la grabación de cada partido.
Álvaro Ybáñez, responsable de Producto de Fly-Fut, explica las peticiones que recibieron cuando llegaron al Real Valladolid para desarrollar su trabajo. «Inmediatamente los entrenadores de porteros nos pidieron que grabáramos determinados planos aéreos para ver la colocación, las salidas... El dron les aporta planos que no les da ninguna otra solución, ni una torre ni un andamio».
